Ahora lo que se busca es una mujer preparada profesionalmente, desenvuelta, carismática y con “porte de reina”, explicó el missólogo Marco Tapia. “Obviamente es importante que una Miss sea bella, pero últimamente las ganadoras de estos concursos son también decididas y modernas. Nacen para ser reinas”, afirmó.

Manuel Wolf, presidente de la Asociación nacional de diseñadores, coincide con esa apreciación. “Una reina de belleza debe tener una robusta personalidad. Y esa personalidad debe ir acompañada de un léxico fluido. Debe ser más que nada glamorosa”, señaló.

A primera vista
No obstante, lo primero que tiene oportunidad de ver el jurado en una candidata es su apariencia física. Nelson Estrella, cirujano que operó a varias de las candidatas al Miss Ecuador 2004, aseveró que “ciertas operaciones” lo que hacen es darles una mayor seguridad a las aspirantes.

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“Actualmente hay algunos patrones de belleza como tener unos pómulos y el mentón ligeramente marcados, ojos en forma de almendra y un cuerpo definido”, sostuvo.

Para Wilson Holguín, preside la Asociación de estilistas del Ecuador, la tendencia actual prepondera la sencillez.

“Las candidatas no deben estar demasiado recargadas de maquillaje ni ser tan plásticas. Lo que se busca es más un rostro angelical”, señaló.

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Cuty Ycaza, directora de maquillaje del concurso Miss Ecuador, afirmó también que un aspecto sencillo es lo más apropiado para las aspirantes al cetro.

“No deben utilizar peinados con mucho spray o con bombas. La sencillez es lo mejor: peinados naturales, pelos sueltos con ligeras ondas. También hay una tendencia a utilizar delineados suaves, maquillajes naturales”, comentó.

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Juanita Taylor, miembro del equipo oficial que arregla a las candidatas, agregó que actualmente están de moda los tonos terracota, los colores tierra en cuestión de maquillaje, pero “nada que recargue su look, se trata de crear un estilo natural, sin saturaciones”.

¿Es real la perfección?
Dentro de un concurso de estas características, en el que se pretende elegir a la representante mundial de la belleza femenina, hay muchos factores, muchos detalles que son tomados en cuenta a la hora de establecer valoraciones: desde cómo camina una candidata hasta cómo se relaciona con las personas.

Para Wolf, no existe un prototipo de belleza, ni la mujer perfecta. “Según el seguimiento que le he dado a estos concursos, no todas las reinas electas han manejado el mismo perfil intelectual, ni físico, ni cultural. Creo más bien que el jurado hace un esfuerzo por escoger una mujer que creen completa”, destacó. (AO)

 

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