Mientras el ex ministro de Bienestar Social, Patricio Acosta, permaneció en la capital y cumplió una agenda privada, el ministro designado para esa cartera de Estado, Antonio Vargas, viajó al Puyo, donde mantuvo reuniones con algunos sectores indígenas.

Los encuentros con las bases de la Confederación de Indígenas Amazónicos (Confeniae) y la Organización de los Pueblos de Pastaza se realizaron en la sede de esta última y en el Instituto Francisco de Orellana, donde Vargas efectuó sus estudios secundarios.

El nuevo funcionario afirmó que su designación tiene el apoyo de unas 200 comunidades indígenas agrupadas en la Confeniae y en pueblos de Pastaza.

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Vargas no ha tenido aún ningún contacto con el Primer Mandatario, quien arribó ayer al país tras participar en la Tercera Cumbre América Latina-Unión Europea, que se desarrolló en México.

Insistió en que su gestión al frente del Ministerio de Bienestar Social se enfocará en “el trabajo por el pueblo” y en el fortalecimiento de la institucionalidad de dicha secretaría. No le preocupa, dijo, el rechazo que los indígenas de la Conaie (Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador), su regional Sierra (la Ecuarunari) y el movimiento Pachakutik han expresado a su designación.

“Lo que me preocupa –sostuvo– son las bases indígenas y el pueblo que se muere de hambre”. Además, indicó, “las bases de la misma Ecuarunari van a estar en la posesión”.

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Entre tanto, está previsto que Acosta ofrezca hoy una rueda de prensa.