Los presidentes de México y de Colombia dijeron este domingo que discutieron la adhesión de Colombia a un plan de desarrollo regional que sería un primer paso para integrar a Centroamérica con las economías sudamericanas.
 
Alvaro Uribe, que el domingo terminó una visita oficial de dos días a México, dijo que de ser aceptado, su país pedirá un crédito a organizaciones de financiamiento internacional para construir una carretera costera entre Colombia y Panamá, que en la actualidad están pobremente comunicados por carretera.
 
El llamado Plan Puebla-Panamá es un proyecto de desarrollo económico en la región mesoamericana que comenzó formalmente en junio del 2001 y que incluye a Belice, Costa Rica, Guatemala, El Salvador, Honduras, México, Nicaragua y Panamá.
 
El presidente de México, Vicente Fox, dijo que había invitado a Uribe a participar en el desarrollo de vías carreteras, de conducción de electricidad y gas entre los países, porque México ve al país andino como un puente con América del Sur, en momentos en que México busca ingresar al bloque comercial Mercosur.
 
"Con los brazos abiertos le vamos a invitar (a Colombia)... Queremos que los otros hermanos centroamericanos también ratifiquen este acuerdo", dijo Fox en una conferencia conjunta con su homólogo Uribe.
 
"Colombia es el eje de conexión en estos diversos campos entre Sudamérica, Centro y Norteamérica", agregó Fox, quien también habló con Uribe sobre combate al narcotráfico y un posible papel como mediador en el conflicto de Colombia con las guerrillas izquierdistas.
 
Uribe dijo que Colombia buscará un crédito ya sea del Banco Mundial, del Banco Interamericano o del Banco de Japón para construir una carretera que una a Colombia con Panamá "y definitivamente contribuir a la unión física de las Américas".
 
El mandatario colombiano agregó que su país busca un acuerdo con Venezuela para construir un gasoducto entre ambos países que también se extendería hasta Panamá.
 
La posible adhesión de Colombia al Plan Puebla-Panamá, auspiciada por México, coincide con la visión mexicana de fortalecer a la región a través de una mayor integración de las economías más fuertes de Latinoamérica.
 
Fox viajará en julio a la cumbre del Mercosur, integrado por Brasil, Argentina, Uruguay y Paraguay, como socios plenos y Chile, Bolivia y Perú como asociados, donde se espera que solicite oficialmente integrarse como miembro asociado.
 
México cree que una adhesión al bloque aduanero podría servir para impulsar una visión latinoamericana en foros multilaterales como Naciones Unidas o la Organización Mundial del Comercio (OMC), además de acercar a las economías de la región.