El legislador de Sociedad Patriótica, Renán Borbúa, pidió ayer ante el Comité de Excusas y Calificaciones del Congreso la descalificación del diputado socialcristiano León Febres-Cordero, a quien acusó de haber tramitado una partida extrapresupuestaria de 30 millones de dólares a favor del cantón Daule (Guayas).

Borbúa acudió ayer, a las 11h30, al Comité de Excusas para presentar los documentos que, a su criterio, prueban que Febres-Cordero gestionó ante el gobierno del coronel Lucio Gutiérrez  una partida para obras de agua potable y alcantarillado pluvial y sanitario para ese cantón.

Dijo que la explicación que realizó Febres-Cordero sobre su gestión de recursos no tiene fundamento al señalar que la petición no era a los recursos del presupuesto, sino del Fondo de Solidaridad, cuando esos fondos pertenecen al Estado. “Todo eso es tramitar partidas extrapresupuestarias que no estaban en el presupuesto del Estado, eso es más que claro; lo que pretende Febres-Cordero es utilizar maniobras acrobáticas para confundir a la opinión pública”, subrayó.

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Febres-Cordero indicó el miércoles que el Fondo de Solidaridad no es parte del presupuesto por ser un organismo autónomo y calificó de canallesca la pretensión de Borbúa de acusarlo de tramitar recursos para Daule.

El presidente del Comité de Excusas y Calificaciones, Hugo Ruiz (ID), aseveró que no le temblará la mano para aplicar la ley, si hay pruebas de que el diputado Febres-Cordero violó la Constitución y el Código de Ética, como afirma el diputado Borbúa. Dijo que la próxima semana el Comité podrá conocer el caso y resolver si se abre la investigación.

Mientras tanto, el alcalde de Daule, Pedro Salazar, dijo ayer a CRE Satelital que el cantón no recibió recursos para la construcción de una planta de agua potable y alcantarillado.
 
Depuración en Congreso
El socialcristiano Xavier Sandoval lamentó que Borbúa haya lanzado, según él, “una calumnia” contra Febres-Cordero, sin importarle las repercusiones políticas que traería para el gobierno de Gutiérrez. Aseguró que su acción provocará que se apliquen “los combos para lograr una descalificación masiva de legisladores”.

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Indicó que la posición de Borbúa facilitará las negociaciones políticas para sacrificar diputados como Gilmar Gutiérrez, José Columbo, Vicente Olmedo y Renán Borbúa, alineados al régimen, y que el sector de centroizquierda e izquierda reclama su descalificación.

Borbúa comentó que no le preocupa la amenaza de los socialcristianos de que su denuncia afectará la composición de fuerzas políticas en el Parlamento. “Lo que haya entre el Gobierno y el Partido Social Cristiano no interesa ahora”, subrayó.

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Borbúa comentó que está dispuesto a salir del Congreso, pero “el primero que tiene que irse es el reo León Febres-Cordero, y me iría atrás feliz empujándole, porque el país se salvaría”, puntualizó.