El presidente de Venezuela, Hugo Chávez, bajó el tono en sus declaraciones previas contra el gobierno de Colombia al afirmar ayer que este no está involucrado en el caso de los 115 presuntos paramilitares colombianos apresados en una finca cerca de Caracas que tenían como supuesto objetivo asesinarlo.

Sin embargo, Chávez denunció que los terroristas que están detrás del grupo de presuntos paramilitares colombianos, que fueron apresados el pasado fin de semana a las afueras de Caracas, tienen su sede en Miami.

Ayer los cancilleres de Colombia, Carolina Barco, y de  Venezuela, Jesús Pérez, se reunieron en Caracas para preparar la agenda de un próximo encuentro entre los mandatarios Álvaro Uribe y Hugo Chávez.

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La cita aún no tiene fecha ni lugar, pero Barco dijo que será “relativamente pronto” en algún lugar fronterizo.

Además, Barco ofreció ayuda al gobierno venezolano para aclarar el incidente de los supuestos paramilitares y mejorar las opacadas relaciones entre ambos países.