El presidente venezolano, Hugo Chávez, dijo este domingo que el grupo de presuntos paramilitares colombianos desarticulado en Caracas pretendía derrocarlo y matarlo.
 
Fuerzas de seguridad venezolanas detuvieron en la madrugada de este domingo a 56 componentes de este grupo y continúan la búsqueda de al menos otros 80 que están huidos, informaron fuentes oficiales.
 
"Le hemos dado un golpe a los golpistas, desestabilizadores y a los terroristas, en esta lucha sin descanso contra el terrorismo, la desestabilización y los enemigos de la democracia y del pueblo", manifestó Chávez en su programa dominical de radio y televisión " Aló, presidente!"
 
También añadió que los organizadores del complot "quieren imponer su agenda del terror, una dictadura" y que no albergaba la menor duda "de que parte de estos grupos están organizándose para intentar el magnicidio".
 
"Ha sido un golpe noble al golpismo y al terrorismo" tras aproximadamente tres meses de investigaciones, añadió.
 
Las declaraciones de Chávez fueron transmitidas en cadena nacional obligatoria para radio y televisión, incluidas las estaciones privadas, a las que culpó de apoyar lo intentos desestabilizadores contra su gobierno.
 
El presidente acusó a varios medios de prensa, emisoras privadas de televisión y diarios nacionales, de minimizar "y tratar de tergiversar la información" sobre los hechos deeste domingo.
 
También elogió la actuación de las fuerzas de seguridad y dijo que la desarticulación de "los terroristas, tiene un impacto positivo no sólo para Venezuela, sino para América Latina en la lucha contra el terrorismo, el golpismo y la violencia".
 
Chávez garantizó la integridad de los detenidos, quienes, "para su suerte -subrayó-, no han opuesto resistencia armada".
 
"Garantizamos los derechos humanos (...) No habrá torturas ni encapuchados, ni sadomasoquismo, porque nuestros soldados y policías no son sádicos", subrayó Chávez en clara alusión a las recientes imágenes de maltratos y torturas a prisioneros iraquíes por parte de soldados estadounidenses.
 
Chávez confirmó que los supuestos paramilitares se entrenaban en la finca de un ciudadano de nacionalidad cubana, "de los cubanos que llaman gusanos, los antifidelistas (...), Roberto Alonso", supuestamente hermano de la cantante María Conchita Alonso.
 
"Ya estamos buscando al cubano éste, al contrarrevolucionario cubano, pero para gloria de Cuba, mientras hay un cubano apoyando a terroristas, hay otros miles de médicos llevando vida y esperanza al pueblo de Venezuela", afirmó.
 
Más de un millar de médicos cubanos participan desde hace varios meses en el programa de cooperación sanitaria "Barrio adentro" de asistencia médica en las zonas más pobres del país.
 
Chávez vinculó al grupo de paramilitares colombianos detenidos con los militares disidentes de la Plaza Altamira en Caracas, que hace dos años se alzaron contra su gobierno.
 
Uno de los detenidos hoy dijo a la emisora estatal VTV que el grupo de irregulares compuesto por 130 efectivos se encontraba en el lugar hace 46 días y que el próximo miércoles tenía previsto asaltar un destacamento militar, en su primera acción.
 
También señaló que militares de alta graduación venezolanos les informaron de que en los próximos días se esperaba la llegada al lugar de unos 1.500 combatientes más de refuerzo.
 
El Gobierno venezolano y el propio presidente Chávez han venido denunciando en los últimos meses nuevos intentos de golpe de Estado por parte de sectores radicales de la oposición.