El fiscal Fernando Yávar inició el miércoles pasado la indagación previa (etapa de investigación) de la denuncia de persecución y llamadas amenazantes que presentó en la Fiscalía el periodista de este Diario, José Solís Solís, el pasado 29 de abril.

Según explicó Solís en su denuncia, en varias ocasiones se han acercado desconocidos a bordo de vehículos hasta las inmediaciones de su casa para decirle que se cuide y proferirle amenazas.

El periodista agregó, en el documento, que el 26 de abril pasado hubo una llamada telefónica a su casa, en la que un desconocido preguntó por él y al no encontrarlo le dijo a quien contestó: “Dígale al licenciado Solís que no se meta con nosotros, que ya vamos a salir”.

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El Comité Permanente por la Defensa de los Derechos Humanos (CDH) envió una comunicación al Comité Interamericano de los Derechos Humanos (CIDH), con sede en Washington, para que este organismo solicite al Estado ecuatoriano “medidas cautelares” en favor del periodista Solís y que se garantice su seguridad. El CDH relacionó las amenazas con el trabajo periodístico de Solís en el caso Fybeca.

Amnistía Internacional (AI) emitió ayer una “acción urgente”, desde el secretariado general en Londres, y mencionó las amenazas al comunicador como parte del caso Fybeca.

AI indicó, a través de un comunicado, que la información sobre este caso se distribuyó a las redes de miles de miembros de la organización para que ellos con el carácter de urgente remitan cartas, telegramas y correos electrónicos al ministro de Gobierno, Raúl Baca, y a la fiscal general, Mariana Yépez.

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“Amnistía Internacional siente preocupación por la seguridad de José Solís Solís, periodista de Diario EL UNIVERSO”, relata el documento, en el que, además, se menciona que las amenazas parecen estar relacionadas con su labor periodística en el caso Fybeca.