Todos los años le ocurre lo mismo, en cualquier lugar del mundo. Don Boettcher, director de Operaciones de la Organización Miss Universo, siempre siente que carga con una responsabilidad de grandes proporciones: garantizar que el espectáculo de elección de la reina universal de belleza llegue en directo a 1.800 millones de personas en  180 países del mundo.

Pero las preocupaciones de Boettcher y el equipo de la Organización, perteneciente al millonario Donald Trump, no se limitan a la transmisión, sino a lograr un espectáculo de calidad donde se promocione el país anfitrión, que cancela alrededor de 5 millones por los derechos para ser la sede del concurso y, adicionalmente, debe financiar los actos relacionados con el concurso, la estadía y los traslados de las delegaciones, como es el caso de Ecuador.

“Lo que queremos decirle al mundo es: hey, Ecuador es un lugar grandioso, entonces si el show no sale bien, nadie lo va a ver y perdemos todos”, exclama Boettcher, quien, junto con Steve Moorman, director de Producción de la Organización Miss Universo, coordina los trabajos en el centro de exposiciones Cemexpo, escenario de la elección final, para convertirlo en un gran estudio de televisión, de proporciones no antes vistas en el país.

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Boettcher describió a Cemexpo, recinto de diez mil metros cuadrados, como el lugar óptimo para instalar los equipos para hacer una transmisión de televisión con alta tecnología. “Todo es ideal, el ancho, la altura, las puertas para ingresar y sacar los equipos”, comenta.

La Organización Miss Universo, en conjunto con la cadena NBC, que efectuará la transmisión, trae toneladas de equipos de televisión. La semana pasada fueron visibles los trabajos  de transformación de Cemexpo, que deben estar listos este 20 de mayo.

Cincuenta toneladas de columnas de hierro, que componen los graderíos para cuatro mil personas, están en proceso de instalación. La alfombra original de Cemexpo se retiró y, en los exteriores del recinto, está lista una construcción donde funcionarán las oficinas de la Organización Miss Universo.

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El martes 4 de mayo empezará el montaje del escenario, que tendrá cerca de 50 metros de ancho por 25 metros de profundidad.

En los 16 años que lleva en la Organización, siempre ha tenido la sensación de que, en cada edición del concurso, aprende a montar el mismo espectáculo porque cada país ofrece condiciones distintas.

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Solo tres personas de la Organización laboran en Cemexpo. Sin embargo, en días previos a la elección, 300 trabajadores estarán a cargo de la edificación del escenario.