Desconocidos dañaron la famosa piedra de 12 ángulos de un palacio inca, causando un daño irreparable a un muro, en una de las calles más turísticas de Cusco, sede de las ruinas de Machu Picchu, en Perú.

“La piedra amaneció con un desprendimiento superficial de unos 15 centímetros de largo por cuatro de ancho, es un acto vandálico”, dijo el jefe de imagen del Instituto de Cultura de Cusco, Ramiro Canal.

La piedra  pertenece al palacio de Sinchi Roca, el segundo Inca del imperio (1.200 d.C-1.533 d.C).