Indígenas aguarunas de ocho comunidades asaltaron ayer un local municipal en una población selvática amazónica y tomaron como rehén al alcalde Oswaldo Peralta, anunció ayer el ministro del Interior de Perú, Fernando Rospigliosi.

El secuestro ocurrió en una población ubicada a doce horas por río desde la ciudad de Yurimaguas, a 800 km al noreste de Perú, solo un día después que indios aymaras lincharan y mataran al alcalde de Ilave, a 1.300 km al sudeste de Lima, Fernando Robles Colomamani.

La policía peruana retomó ayer el control de Ilave, dijo el ministro, quien anotó sin embargo que se desconoce el paradero de otros tres funcionarios municipales que fueron tomados como rehenes por la turba.

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Rospigliosi señaló que el gobierno no descarta cualquier opción como la declaratoria de emergencia, para evitar más violencia.

La movilización de la población aymara de esta región se inició hace 25 días para exigir la dimisión de tres alcaldes de la provincia del Collao, entre ellos Robles, lo que provocó el bloqueo del puente que une Puno, en Perú, con Desaguadero, en Bolivia e impide el turismo y la actividad comercial.