Como un hecho comprobado se da el que un usuario reporta al 132 que su línea está malograda.
La operadora reporta al Departamento Técnico, que emite las órdenes de reparación a las empresas contratistas, las cuales envían a sus técnicos asignados al sector correspondiente al que pertenece la avería.
Así, se procede a reparar la línea del teléfono reportado y de inmediato dañan dos o más líneas del mismo “cajetín”; porque esa es la consigna que recibe de la empresa contratista con Pacifictel, la cual cobra por líneas reparadas, volviéndose el “mal de líneas”, el cuento de nunca acabar y un jugoso negocio para ambiciosos contratistas externos.
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Prof. Ermel Aguirre González
Guayaquil