El Boca Juniors y el Bolívar decidirán mañana la clasificación a la segunda fase de la Copa Libertadores en el grupo 8, que lograrían con un empate, coincidentes en la necesidad de ganar para evitar sorpresas.
 
Ambos equipos suman nueve puntos en el liderato, con una diferencia de goles que favorece a los boquenses (+3 contra +1), pero el Cali colombiano y el Colo Colo chileno tienen seis y juegan también mañana, por lo cual no pierden la esperanza de superar con una victoria al derrotado en Buenos Aires.
 
Por esa razón, Carlos Bianchi, entrenador del Boca Juniors, está decidido a poner en el campo a la mayor cantidad posible de titulares frente a un rival de cuidado, que le iguala en cantidad de partidos ganados (3) y goles marcados (7).
 
El equipo argentino sufre la baja del central Nicolás Burdisso, lesionado, quien será sustituido por el lateral colombiano Luis Perea, quien en realidad ocupará el puesto en el que jugaba antes de incorporarse al Boca Juniors.
 
El delantero Guillermo Barros Schelotto, recuperado de una dolencia que le mantuvo inactivo una semana, está concentrado y es probable que esté en el banquillo de los suplentes.
 
"Saldremos a ganar como lo hacemos siempre. No nos interesa depender de nadie y, aunque un empate nos vendría bien, nosotros queremos los tres puntos", afirmó el meta argentino Roberto Abbondanzieri
 
En el mismo sentido se expresó el lateral boliviano Luis Gatty Ribeiro, quien dijo que el Bolívar está dispuesto a obtener la clasificación por méritos propios, sin pensar en el encuentro que caleños y colocolinos disputarán en el Valle de Cauca.
 
En el Boca Juniors, único imbatido y líder solitario del torneo Clausura argentino con cuatro puntos de ventaja sobre el River Plate, que está segundo, aumenta partido tras partido la convicción de que el equipo puede ganar ambas competiciones.
 
Bianchi no niega ese objetivo, pese a la cautela que mantiene en sus declaraciones, y los jugadores coinciden en que los resultados, el rendimiento del equipo y la funcionalidad de las individualidades frente a los permanentes cambios de alineación que imponen las circunstancias, son argumentos alentadores para afianzar esa pretensión.