Habitantes de diez comunidades de este cantón, que se benefician con las aguas del río Junquillo, se muestran preocupados porque este afluente presenta un bajo caudal, pese a que aún se mantiene la temporada invernal.

Los agricultores de esta zona pidieron a las autoridades provinciales la ayuda para dragar el río y evitar que se pierdan los cultivos. Jacinto Barco, agricultor del recinto California, señaló que la situación de los sembradores de la zona se vuelve cada vez más crítica, por cuanto el río se ha secado en los últimos años.

Este problema, según coinciden los pobladores rurales de Baba, se debe a que las autoridades anteriores del cantón Salitre (Guayas) dragaron el río Vinces, lo que perjudicó al río Junquillal, que es un ramal del Vinces. Las comunidades afectadas son Rancho Grande, Matecito, Versalles, La Paila, Pica Pica, San Francisco, Progreso, Higuerillas, Tinoco y California.

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“Desde hace unos cuatro años que el río se va secando y en la actualidad todo esta embancado. De los casi 12 metros de ancho que tenía el río, actualmente apenas tiene 2 metros y con poca agua”, manifestó Galo Solís, dirigente comunitario.

Añadió que el bajo caudal no abastece para regar los sembríos  ni para los quehaceres domésticos. Los moradores perjudicados se reunirán la próxima semana para viajar en comisiones a fin de dialogar con  las autoridades de los cantones Vinces, Baba, Salitre y el Consejo Provincial del Guayas, para que les den solución a este inconveniente, manifestó Julio Medina, del recinto Pica Pica.