La Liga Arabe rechazó este sábado la "nueva"  posición estadounidense en el conflicto israelí-palestino, al término de una reunión extraordinaria consagrada al examen de la situación a raíz de las recientes declaraciones del presidente George W. Bush.
 
Esta posición "destruye el proceso de paz en Oriente Medio y sus  referencias, las resoluciones de la ONU y (la conferencia de) Madrid", de 1991,  que instauró el principio de la "tierra contra la paz", indicó en un comunicado  el Consejo de la Liga.
 
También agregó que "nadie" puede hacer "renunciar (los derechos) del pueblo  palestino (...) sobre todo en lo que respecta a la creación de un Estado  independiente en su territorio con su capital en Jerusalén".
 
"Todo acuerdo relativo al futuro del pueblo palestino y su Estado  independiente debe hacerse con su dirección legítima y elegida, presidida por  el presidente Yasser Arafat", señaló la Liga.
 
El Consejo de la Liga afirmó su "compromiso con la iniciativa de paz  árabe", que prevé una normalización de las relaciones de los árabes con Israel  a cambio de la retirada israelí de los territorios árabes ocupados en 1967 y  exhortó a que se busque una "solución justa del problema de los refugiados  conforme a la resolución 194 de la Asamblea General de la ONU", que contempla  el derecho al retorno para los palestinos.
 
Instó a Estados Unidos a que "haga lo necesario para evitar un colpaso de  los pilares del proceso de paz" y a los "miembros del Cuarteto (Estados Unidos,  ONU, Unión Europea y Rusia) a que asuman sus responsabilidades para preservar  los derechos permanentes del pueblo palestino".
 
Bush dio el miércoles la luz verde al plan del primer ministro israelí,  Ariel Sharon, para la separación con los palestinos y calificó de "irrealista"  el repliegue de Israel a sus fronteras de 1949, una posición que abre la vía a  la modificación de las fronteras establecidas antes de la guerra israelo-árabe  de junio de 1967, a las que se refiere la resolución 242 del Consejo de  Seguridad de la ONU, base hasta ahora de todos los proyectos de solución del  conflicto.
 
El secretario general de la Liga Arabe, Amr Moussa, declaró a la prensa  después de la reunión que las declaraciones de Bush "han aumentado el grado de  pesimismo" en el mundo árabe.