400 gendarmes ingresaron a los centros carcelarios y 3 buzos de la Policía revisaron las alcantarillas.

Once días después del inicio del motín en el ex penal García Moreno y la Cárcel Nº 3, la Policía ingresó a esos centros penitenciarios, controlados hasta ayer por los internos. La incursión fue para investigar la fuga de cerca de 50 reos.

El operativo empezó a las 13h30. Llegaron unos 400 efectivos del Grupo de Intervención y Rescate (GIR) y del Grupo de Operaciones Especiales (GOE), quienes desde las 14h00 entraron a la cárcel en grupos de 50 gendarmes.

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Afuera del ex penal estaban dos tanques antimotines y una ambulancia de la Policía, que se movilizó media hora después de iniciada la incursión.

A las 15h00, los patios de las cárceles quedaron vacíos, como indicio de una aparente calma. Sin embargo, poco después se escuchó una fuerte explosión dentro del ex penal.

No se conoció de qué se trataba esa detonación. El operativo concluyó a las 16h00.

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A las 16h45 ingresó a la Cárcel Nº 3 una comisión integrada por Fernando Cassis, director Nacional de Rehabilitación Social (DNRS); Ricardo Arteaga, dirigente de los trabajadores de las cárceles, entre otros funcionarios.

La comisión verificó que en los patios de la Cárcel Nº 3 había una pila de documentos quemados, junto a cuatro escritorios y dos computadoras destruidas. Arteaga dijo que entre esos papeles estaban boletas de libertad de los internos y archivos correspondientes a los últimos diez años.

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Hasta las 22h30, la Policía confirmó que el reo Andrés Vargas Román fue trasladado al hospital de la institución por heridas en las manos y pecho causadas por esquirlas.

Asimismo se informó que a las 21h00 se pasó lista a los internos. No respondieron Carlos Zambrano y Patricio Rogel, detenidos en el pabellón B del ex penal, novedad que se hizo conocer a la DNRS.

Tres buzos del GOE inspeccionaron –la mañana de ayer– el sistema de alcantarillado en los alrededores del ex penal, por donde se fugó un número aún no determinado de presos la noche del martes.

Los buzos encontraron un túnel de unos 15 metros de largo que sale de la Cárcel Nº 3 y se conecta con la red de alcantarillado. El lugar identificado por la Policía como puerta de fuga de los presos es una alcantarilla dentro de una casa abandonada, a una cuadra del ex penal, donde se hallaron prendas mojadas de los presos y un hueco en una de las paredes por donde supuestamente huyeron hacia las lomas del barrio El Placer.

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Dentro del túnel se hallaron un tanque de gas conectado a unos cables eléctricos, una bujía, un foco, ropa y armas blancas. La revisión de los túneles empezó desde una alcantarilla ubicada en una cancha en la calle Cumandá.