Los barrios tienen un promedio de diez negocios que atienden entre 30 y 50 clientes, según el tipo del local.

En el pequeño local hay tres máquinas para lavado y secado de prendas de vestir. Son los equipos que usa hace un año Mariuxi Cortez para atender a unos 30 clientes fijos que buscan el servicio de lavandería en el sector de El Oro y Los Ríos.

La agencia fue asignada como la tercera de cuatro locales de lavado que bajo el nombre de La Elegancia tiene la familia de Cortez en otros barrios de la ciudad. Las lavanderías son uno de los aproximadamente 10 tipos diferentes de negocios que se expanden en  barrios y ciudadelas que están lejos del centro de Guayaquil y que, formados con capitales que van desde los 3.000 a 10.000 dólares,  comenzaron con la formación de los denominados corredores comerciales.

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Un ejemplo de esto se sitúa en ciudadelas como Sauces IX, donde en un corredor pueden situarse desde cinco negocios seguidos ofreciendo diversos servicios.

Datos de asociaciones que agrupan a estos negocios y estudios de mercado realizados por empresas que comercializan productos determinan que en la ciudad hay más de 50 mil negocios   en los barrios: tiendas, panaderías, ferreterías, cibercafé, bazar, gabinetes de belleza, farmacias, lavandería.

Fábricas de comestibles locales  determinaron que en Guayaquil pueden existir más de 25 mil tiendas de abastos, la Asociación de Cyber café de Guayas calcula que en la urbe hay más de 350 que ofrecen internet y llamadas internacionales.

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Además se estima que hay más de 2.000 farmacias y droguerías, cuyo mayor número están en las periferias, lejos del centro.  La mayor parte tiene promedios de atención de 30 a 50 clientes, dependiendo de los tipos y frecuencias de los comercios.

Y hay quienes antes de ubicar sus negocios en los barrios hacen sus propios sondeos para determinar qué requiere el sector. Eso ejecutó Sonia Bolaños antes de abrir una miniboutique, en una de las calles de Sauces 8, en cuyo entorno, menor a un kilómetro, hay desde lavanderías populares, farmacias, ciber, ferreterías y restaurantes que compiten por la clientela del barrio.

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Pero no solo el auge de los micronegocios es propio de las ciudadelas, también en zonas populares como La Prosperina (norte) o Siete Lagos (sur) experimentan esta tendencia, especialmente, con la instalación de lavanderías populares.

Julio Castro, morador de esta última cooperativa, indica que hace cinco años no había observado “antes iba al centro a comprar con mayor frecuencia, pero ahora lo hago menos porque uno consigue casi de todo en los barrios”.

Eso también lo percibe el ingeniero comercial Gabriel Montalván, propietario de un ciber que en un barrio del norte atiende a unos 50 clientes. “Parece que la gente acude al centro a realizar compras grandes, pero los servicios que tiene en el barrio los usa con frecuencia”.

Superficies
Barrios
Algunas empresas que antes solo manejaban locales en el centro o en zonas comerciales grandes de Guayaquil ahora buscan también los barrios. Farmacias Victoria, la cadena de panaderías California y Almacenes Japón tienen presencia en zonas barriales y populares de la ciudad. Incluso hay ofertas que se promocionan en los locales.

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Empresas
Compañías como Industrias Lácteas Toni, Indulac, Inalecsa, tienen una fuerte presencia en las tiendas o abastos de barrios. Un estudio de la consultora Ipsa, por ejemplo, determinó que de cada 10  tiendas, 7 comercializan snacks. La mayor parte de estos negocios están en los barrios.

Ventas
Las empresas reconocen que los barrios son uno de los puntos referenciales y potenciales para las ventas. Cervecería Nacional, Coca Cola, Unilever, Il Gelato tienen congeladores o dispensadores en negocios barriales. Incluso las firmas de telefonía móvil han llegado con cabinas y servicios de locutorios.