Angustiada por la pérdida de su cónyuge, María Lema de 36 años, dijo que el cadáver de su esposo lo encontraron alrededor de las 01h00 y tenía un corte de arma blanca en el cuello.

“Nadie ha visto nada, una señora dijo que se acercó al taxi porque estaba mal estacionado, tenía la radio y las luces encendidas y su cabeza estaba contra el volante”, expresó mientras lloraba.

Lema agregó que, al parecer, los delincuentes lo atacaron porque su esposo puso resistencia para que no le robaran. “Se llevaron solo dinero, no sé qué cantidad, pero él tenía 24 dólares sueltos para dar vuelto”, agregó.

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Bucay Jiménez trabajaba como chofer, desde hace tres meses, en el taxi de placas GAX-453 de la cooperativa Exxon y que no era de su propiedad. Tenía el horario de 18h00 a 06h00, y en el día laboraba junto su esposa en una tienda de víveres.

El taxista era oriundo de Quito y se trasladó a vivir al cantón Durán en octubre pasado. Junto con Lema procreó tres hijos, quienes quedaron en la orfandad.