La comunidad mostró indignación por la supuesta tardanza de los bomberos en acudir al lugar. “El niño se aferraba a la vida, gritaba que lo ayuden, quería salir por la ventana pero las rejas lo impedían. Tenía los brazos quemados, después se cayó y ya no lo vimos”, dijo con desesperación Liliana Banchón, moradora de la cooperativa La Paz, en Las Malvinas, al sur de la ciudad.

Alfredo Morán Piza, de 12 años, fue la víctima del incendio que ocurrió ayer a las 08h00 en la vivienda de dos plantas y de construcción mixta, de ese sector marginal, ubicada a una cuadra de la vía Perimetral.

Los habitantes atribuyeron la causa del fuego a un posible cortocircuito. Las llamas iniciaron en el segundo piso y sorprendió a cuatro de los siete habitantes que estaban ese momento en el inmueble, entre ellos el niño fallecido y sus tíos Xavier de 20 años, Cynthia de 22 y Wendy Sánchez Morán de 23, a quienes se los trasladó al hospital Guayaquil con múltiples quemaduras.

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Los vecinos, con sus vestimentas renegridas por el humo y la ceniza, lamentaban no haber podido combatir el fuego. “Ni siquiera hubo agua”, expresó desconcertado uno de ellos. “Las llamas quemaron las escaleras y los ocupantes del inmueble no podían salir, por eso gritaban y pedían auxilio desde una ventana”, relató Liliana Banchón.

La mujer dijo que apenas vieron el fuego llamaron a los organismos de socorro. “Al 911 y solo en contestar se demoraron una eternidad”, agregó. “Estos señores no sirven para nada. Me comuniqué con el 101 y me dijeron que llamara al 102, y estos no me contestaron. No puede ser posible”, refirió indignado Pedro Chiguallo.

En medio de la desesperación, decenas de moradores, mientras esperaban a los bomberos, abrieron un agujero en la pared de bloques para intentar el rescate de las víctimas. “El piso se quemó y ellos cayeron a la planta baja, pero el niño se quedó arriba, logramos salvar a los adultos, y fue difícil al pequeño porque no tuvo fuerzas para saltar”, reveló el vecino Jamil Alvarado.

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“No se imagina la angustia que provocó ver a ese inocente en la ventana. Se necesitaba una escalera como la de los bomberos para romper la pared y sacarlo, pero llegaron demasiado tarde”, indicó Ricardo Murillo.

El morador agregó que la primera motobomba llegó aproximadamente a las 08h30. “A pesar de que hay una unidad aquí en el sur, primero llegó un grupo de policías”, afirmó Murillo. Las otras unidades (diez en total) llegaron entre diez y veinte minutos después, acotó.

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Envuelto en una sábana, junto a la puerta de ingreso a la vivienda, en medio del agua que chorreaba de las mangueras yacía el cadáver del niño, ante la mirada estupefacta de amigos y vecinos, mientras el interior de la morada quedó reducida a ruinas. “Nada se rescató, nos empeñamos en salvar a las personas, pero el niño se nos fue”, señaló consternado Jamil Alvarado, quien agregó que las víctimas no tenían familiares en el lugar.

Los padres del menor viven en el km 26 de la vía Durán-Tambo, pero él residía temporalmente con sus tías.

FUEGO
VÍCTIMAS
Alfredo Morán Piza, de 12 años, estaba de visita en la casa que habitaban sus tíos Xavier, Cinthya y Wendy Sánchez Morán.

FALTA DE AGUA
Moradores se quejaron por la falta de agua en el sector lo que según ellos, les impidió ayudar en la extinción del fuego.

DIFICULTADES

Las llamas y el acceso al inmueble dificultaron el ingreso de ayuda para el rescate de las personas que estaban atrapadas en la segunda planta.

BOMBEROS

Los bomberos, dirigidos por el Myr. Cristian Huerta, no dieron explicaciones sobre el caso.