Qué bien, se acerca el momento en el que finalmente podremos disfrutar de una adecuada carretera que nos lleve con seguridad a nuestras playas, en la Península de Santa Elena.

Vale la pena tomar medidas para que los by pass que se están construyendo  para evitar pasar por las poblaciones Cerecita, Progreso y Zapotal, no se conviertan en un nuevo lugar de invasiones para construir viviendas y comercios informales.

Hay que mantenerlos libres para que el paso sea fluido y seguro, tanto para los conductores como para los moradores.

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También se debería aprovechar la situación para que los pobladores atraigan a los turistas, y estos ingresen a los pueblos a degustar sus ricas comidas, y a hacer uso de los distintos bienes y servicios que estos puedan ofrecer con apoyo o asesoramiento del Ministerio de Turismo.

Sería bueno que cada pueblo se especialice en un par de productos, de tal forma que a nadie se le ocurra ir a comer un seco de chivo o carne en palito, en otro lugar que no sea Zapotal, o ya sea una guatita o caldo de manguera en Cerecita, o una rica y nutritiva fritada o seco de gallina en Progreso.

Evidentemente estos son ejemplos de muy buena voluntad de alguien que no es ni remotamente entendido en la materia ni culinaria ni turística, pero con algo de criterio de lo práctico y lógico.

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Pablo Baquerizo Vivar
Guayaquil