El precio del crudo registró este viernes una leve alza en Nueva York, mientras los operadores permanecen atentos a la evolución de existencias de gasolina y a posibles acciones del Gobierno de Estados Unidos para frenar su encarecimiento. 
 
Los contratos para mayo del Petróleo Intermedio de Texas terminaron la sesión regular a un precio de 34,39 dólares por barril, después de ganar 0,12 dólares respecto de la sesión anterior.
 
Los contratos de petróleo Brent para mayo registraron por el contrario un fuerte descenso en Londres y quedaron a 30,21 dólares el barril, tras restar 1,34 dólares al precio del jueves.
 
El valor de los contratos de gasolina para mayo se mantuvo en 1,07 dólares por galón (3,78 litros), y el de gasóleo de calefacción para ese mismo mes también permaneció en 0,85 dólares el galón.
 
El precio del petróleo de Texas apenas osciló hoy en el mercado neoyorquino, aunque ha perdido un 3,8 por ciento de su valor en sólo dos sesiones y después de cotizar el miércoles a 35,76 dólares el barril.
 
El petróleo para entrega en mayo se depreció más de un 4 por ciento el jueves, a medida que los operadores analizaban el efecto del recorte de un millón de barriles en la oferta por parte de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) y el nivel en que quedaron las reservas almacenadas la pasada semana.
 
También influyó en el descenso la posibilidad de que el Gobierno de EE.UU. excluya de forma temporal a algunos estados de la aplicación de medidas anti contaminantes más estrictas, que complican el ritmo de producción de las refinerías y puede ocasionar retrasos en los suministros, según los expertos.
 
Sin embargo, los expertos resaltaron hoy que las autoridades no han tomado aún medida alguna en ese sentido, por lo que los mercados quedaron en espera de que esas expectativas se confirmen.
 
Además, subrayan que está por ver si los productores de la OPEP serán ahora más disciplinados que en el pasado con el cumplimiento de las cuotas asignadas, que en caso contrario haría que el recorte de producción fuese más teórico que real.
 
En cuanto a las reservas, el nivel de gasolina almacenada en EE.UU. es ahora similar al de hace un año, pero el ritmo de demanda es superior.
 
La demanda media en las últimas cuatro semanas ha sido de 8,9 millones de barriles diarios, un 3,6 por ciento por encima de la cifra de hace un año, según datos del Departamento de Energía.
 
Las ventas de contratos por parte de fondos de inversión, que apostaron en el pasado a que los precios continuarían al alza, es otro factor que ha contribuido al descenso en los precios, según los analistas.