Dirigentes de la comunidad Sarayacu, al sureste de Puyo, opuesta a la actividad petrolera en sus territorios, denunciaron que el jefe del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas, Octavio Romero, ingresó intempestivamente a la zona, acompañado de otros diez militares que portaban armas, para presionar que dejen acceder a las petroleras.

Marlon Santi, presidente de Sarayacu, afirmó que Romero llegó a las 09h05 de ayer. “La sorpresa y el temor de los habitantes de Sarayacu fue inmediata, ya que en ningún momento, el jefe militar había informado de su arribo al pueblo”, señaló el directivo.

Santi repitió la supuesta advertencia de Romero: “Si no hay unión y no hay amistad, a lo mejor los militares vamos a tener que ingresar a la fuerza”.