El Banco de España percibe una "notable incertidumbre" respecto al posible impacto de los atentados del pasado día 11 en Madrid sobre los indicadores de gasto, ya que se dispone aún de muy poca información sobre su previsible efecto, como se recoge en su boletín económico de marzo publicado este jueves.
 
"Aunque es posible que se perciba algún impacto en los datos de confianza de los próximos meses, existe notable incertidumbre sobre la medida en que éste pudiera trasladarse a los indicadores de gasto", asegura la publicación.
 
La información recogida en la publicación se refiere, en parte, al último trimestre de 2003, en el que "el incremento interanual del PIB español se situó en el 2,7%, tres décimas por encima de la tasa del tercer trimestre, cerrando el año con un crecimiento del 2,4% ".
 
Al elaborarse el informe, la mayoría de los indicadores disponibles para los primeros meses de 2004 apuntaba, en general, comportamientos compatibles con la línea de recuperación que marcaban los datos del PIB de 2003.
 
Sin embargo, hay que considerar que "se dispone todavía de muy poca información sobre el impacto que el ataque terrorista del 11 de marzo en Madrid haya podido tener en la economía a corto plazo", se concreta en el boletín.
 
"Ya cerrado este boletín, se han recibido los indicadores de confianza del mes de marzo, que todavía no reflejan un efecto atribuible a los atentados", se añade.
 
Los indicadores más actualizados de consumo privado han tendido a mostrar "bien un mantenimiento, bien una mejora en su evolución", mientras que en la inversión en equipo se fortaleció su producción y mejoraron las importaciones.
 
En cuanto al mercado laboral, se recuerda que los últimos datos relativos a febrero mantienen la pauta de mejora registrada el mes anterior, mientras que en febrero se firmaron 1,38 millones de contratos, el 15,5% más que en ese mes de 2003, y aumentó el 3,1% el número de inscritos en la Seguridad Social.
 
Asimismo, en febrero la inflación redujo su ritmo de crecimiento interanual por tercer mes consecutivo, hasta el 2,1%, la menor tasa registrada desde principios de 1999, sobre todo debido al menor crecimiento de los principales componentes del índice, con la excepción de los servicios, con precios en crecimiento estable.
 
También el resultado ordinario neto de las empresas no financieras aumentó el año pasado el 15,9% en relación a 2002, cuando creció el 1,2%, según los datos del informe.
 
Añade que el crecimiento de la actividad empresarial, superior al de 2002, se basó en la positiva evolución del consumo y de la construcción, en una cierta recuperación de la inversión en bienes de equipo y en una contribución negativa de la demanda exterior.