El ex capitán de las selecciones de fútbol de Perú, Héctor Chumpitaz, salió ayer de su casa luego que una jueza dejara sin efecto su arresto domiciliario que cumplía hace tres años en un proceso que se le sigue por complicidad en peculado, dijo una fuente judicial.

El ex jugador quedó sujeto a orden de comparecencia mientras dure el proceso en su contra, según lo dispuso la jueza anticorrupción Inés Villa  Bonilla, quien consideró que no hay mérito para que siga con arresto en su domicilio.

“Mi familia y yo estamos contentos con esta decisión”, dijo Chumpitaz, considerado el Capitán de América, e indicó que nunca más volverá a meterse en situaciones que  no conoce.

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Chumpitaz fue procesado por recibir $ 30.000 de Vladimiro Montesinos, ex brazo derecho del ex  presidente Alberto Fujimori, para solventar su campaña electoral en la que fue elegido concejal de la Municipalidad de Lima en 1998. Por ello, se lo acusó del delito de complicidad en peculado.

En su defensa, el deportista dijo que no tenía experiencia política y que desconocía que el dinero que recibió era del Estado. Aseguró también que aceptó  ser edil para enseñar fútbol a los niños pobres de la capital.