Un ramal del estero Salado que se ubica a la altura de la vía Perimetral, frente a la estación de gas de El Salitral, al norte de Guayaquil, recibe desde hace más de quince años descargas de aguas servidas de dos asentamientos del sector.

Y estas son generadas por  1.000 familias de la urbanización Puerto Azul y otras 300 de la cooperativa Puertas del Sol, ambas ubicadas a la  altura del km 10 de la vía a la costa, según Interagua.

La ciudadela está poblada desde hace más de quince años y recoge sus descargas domiciliarias en una estación de bombeo ubicada en la urbanización, desde donde las envía directamente y sin tratamiento, por una tubería que desemboca en el estero.

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La cooperativa se inició hace más de una década como invasión y no tiene aún sistema de alcantarillado, por lo que descarga sus aguas crudas a través de rudimentarios pozos sépticos que producen infiltraciones que llegan al estero.

Rosa Sinche, Pedro Navarrete, Gloria Borja y otros moradores de Puertas del Sol se quejan de los malos olores que producen las descargas domiciliarias que llegan al estero.

Fernando Alvarado, vocero de Interagua, empresa que tiene a cargo la concesión del servicio de agua potable y alcantarillado de la ciudad, confirmó que la institución tiene la competencia y responsabilidad en el asunto. Explicó que en la zona se construirá un nuevo sistema en el que se incorporará a  Puertas del Sol.

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Pero este trabajo no será inmediato. “Está previsto en el Plan Maestro que elabora Interagua que estará listo en agosto de este año y que empezará a aplicarse paulatinamente en todas las áreas que la ciudad lo necesite”, reveló.