Las centrales de generación eléctrica de Guayaquil cambiarán su hábito de consumo; desde el primer trimestre del 2006 utilizarán gas en vez de diésel para fabricar energía.  La modificación permitirá, según Jorge Brito, presidente ejecutivo de Transelectric, bajar los precios de la electricidad a los consumidores.
Las generadoras que operan con diésel venden cada kilovatio a un promedio de 10 centavos de dólar; con gas el precio bajará a 3 o 3,5 centavos. Según Brito, la actual generadora Termopichincha, ubicada en Santa Rosa (Chillogallo-Quito), también se trasladará a Guayaquil para que consuma gas y no diésel, ya que encarece el precio de la electricidad.

El gas que consumirán las plantas provendrá del Perú, del bloque 19, que limita con Ecuador. El medio de transporte será un gasoducto (tubería que traslada ese combustible) que se construirá a un costo inicial de 28.000 dólares cada kilómetro; desde el bloque 19 a Guayaquil son 200 kilómetros.

Dentro de los planes para bajar las tarifas eléctricas, Transelectric acordó con las compañías generadoras de Colombia que los grandes consumidores de Ecuador (empresas comerciales e industriales) firmen contratos directos para comprar energía a ese país.

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La medida busca volver más productivas a las empresas, que aseguran que el precio del kilovatio hora en Ecuador es el más caro de Latinoamérica, y que debido a  ello, aumentan el precio de los productos que expenden al consumidor. 
Los contratos regirán por un año, renovable, y el mayor beneficio es que el precio estará congelado durante ese tiempo.