En el 2003 se denunció supuesta concesión
En mayo del 2003, Roque Sevilla, presidente de la Cámara de Turismo de Pichincha, y Pedro de la Cruz, presidente de la Confederación de Organizaciones Campesinas, Indígenas y Negras (Fenocín), denunciaron una supuesta negociación entre los gobiernos de Ecuador y Estados Unidos, para la instalación de una base de ese país en la isla Baltra.

Sevilla se acogió al derecho del silencio y no dio los nombres de las personas que le informaron sobre las negociaciones.

De la Cruz, por su parte, rechazó la posible concesión y dijo que las Galápagos deben ser declaradas como una zona de paz, “para que se halle exenta de toda intromisión militar”.
 
Domínguez: FAE busca definir sus propiedades
El ex comandante de la FAE, Gral. Oswaldo Domínguez (2000-2002), explicó que lo que está haciendo esta rama militar es cumplir con un plan para levantar el catastro de sus propiedades en el país.

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Explicó que dicho plan comenzó en septiembre del 2000, cuando entró en vigencia la Ley Trole 2, que separó a la Dirección de Aviación Civil (DAC) de la FAE.

Domínguez indicó que por más de 30 años la DAC y la FAE mantuvieron una relación directa y algunos territorios como las bases aéreas y aeropuertos estaban sin una debida definición.

“No tiene este plan ningún viso político, ni geopolítico, ni ningún involucramiento, los criterios en ese sentido no son más que simples elucubraciones”, enfatizó el ex jefe militar.

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Ministerio de Turismo: Visitas no se afectan
Sobre la posibilidad de que Baltra sea empleada para prácticas militares relacionadas con el Plan Colombia, el Ministerio de Turismo informó que se acoge al pronunciamiento del presidente de la República, coronel Lucio Gutiérrez, en el sentido de que Baltra no será involucrada.

Ernesto Trujillo, jefe de Comunicación Social de esa cartera, indicó que, en vista de que no se tiene previsto construir una base militar en la isla, las actividades turísticas no se verán afectadas. “El Presidente ha dicho que no habrá cambios, lo que no altera el turismo”, dijo.

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El Ministerio del Ambiente no definió, hasta ayer en la tarde, ninguna posición sobre el tema.