Los familiares de Manuel Oswaldo Cisneros Villacís, de 32 años, fallecido en el atentado terrorista del pasado jueves en Madrid, claman por el retorno de su cadáver.  “Nuestro deseo es que llegue para enterrarlo junto con nuestra madre, en el cementerio del cantón Mera”, expresó Rocío Cisneros.

Manuel Oswaldo era soltero y, según Rocío, tenía previsto regresar a Mera, en la provincia de Pastaza, en agosto próximo, para asistir a la misa de recordación de su madre, fallecida hace un año y medio.

Era el octavo de diez hermanos, de los cuales  nueve hoy están vivos. Ellos son: Alba, de 45 años, quien vive en Cuenca; Yolanda, Maruja, Teresa (quien también vive en Madrid), Miriam, Rocío, Jorge, Giovanni (sargento segundo de la Policía, a quien el dieron el pase a Loja) y Carmita Cisneros Villacís, de 23.

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Maruja, quien habita con Rocío en una modesta vivienda del cantón Mera, narró a este medio que Manuel se trasladó a Cuenca para trabajar, pero que al presentarse la oportunidad viajó a Madrid, España, y luego se llevó a Teresa.

En Madrid, Manuel Cisneros trabajaba en construcciones y su deseo, según la familia, era regresar a Mera y quedarse con sus hermanas, pues viven solas con sus hijos, porque desde que la madre falleció, su padre, Saulo Cisneros, se fue a Cuenca.

Los amigos le decían Manolo, y según refieren, llegó a Mera cuando aún era un niño y estudió en el colegio agropecuario de ese cantón.  Yolanda y Rocío pidieron ayer que quien conozca a su hermana Teresa, le digan que realice los trámites para trasladar el cadáver.