La cinta La pasión de Cristo, la más reciente versión de las últimas doce horas de la vida de Jesús, dirigida por Mel Gibson, se exhibe en estos días para los fieles católicos en algunas iglesias de La Habana.

Las proyecciones del filme comenzaron esta semana en la iglesia habanera Santa Rita, donde a partir de ahora continuará un ciclo para grupos de la comunidad, según explicó el padre José Félix Pérez Riera, secretario de la Conferencia de Obispos Católicos de Cuba (COCC).

Agregó que los primeros en asistir a las proyecciones serán los catequistas, los matrimonios y los jóvenes, pero el propósito es que antes de la Semana Santa la puedan ver todos los miembros de la comunidad, excepto los menores de 14 años.

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Las copias en video de la película que se exhiben en Santa Rita y otras iglesias habaneras llegaron a la isla a través de personas que viajaron al exterior y las trajeron a su regreso o de familiares residentes en Estados Unidos que se las enviaron. En otras diócesis de la isla, también empezará a proyectarse en breve la película.

A juicio del secretario general de la COCC, en la polémica que ha generado el filme hay “cierta hipocresía en la ligereza de pronunciamientos y críticas que le han atribuido abuso de la violencia”.

En su opinión, se trata de “una violencia que responde a una realidad”. Además, dijo, no es una violencia que genera otra, sino al contrario, lo que genera es el amor y el perdón de cualquiera que esté siendo víctima de la crueldad y pide el perdón para los verdugos y los perdona en su corazón”.

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“Creo que la violencia que muestra el filme no es cuestión de sangre sino del realismo del sufrimiento, algo más profundo y más intenso que el dolor físico”, apuntó. La opinión de Pérez contrasta con la expresada recientemente por el presidente de la Conferencia Nacional de Obispos de Brasil, Gerardo Majella Agnello, quien tras ver la cinta consideró que es “terriblemente cruel, ofensiva y llena de una violencia innecesaria”.