Este viernes se inaugura el XX Mundial de surf, en la playa de la FAE, en Salinas, que contará con la participación de 27 países confirmados hasta el momento.

Las delegaciones llegarán al país desde mañana.

Gran Bretaña, Francia y Sudáfrica, serán los primeros elencos que arribarán a Guayaquil.

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Ecuador entrenó ayer a doble jornada en el sector de Tres Cruces, en Salinas.

El surf femenino de Ecuador en busca de las mejores olas
A sus 33 años, Iliana Crow de Aguirre a diferencia de otras mujeres prefiere compartir su tiempo entre la espuma de las olas y su numerosa familia. El surf le ganó gran parte de su vida. Nunca intentó alejarse de las playas y como complemento de su pasión está casada con Javier Aguirre Molina, quien también practica este deporte.

En los últimos años las mujeres son parte fundamental del crecimiento del surf en Ecuador. No solo es belleza dentro del agua. Sus destrezas, agilidad y excelentes maniobras han hecho que el sexo femenino esté presente en importantes competencias como el próximo Mundial de surf, en Salinas.

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“Mis hijos surfean todos los fines de semana que se pueda conmigo y mi esposo. De esta manera nos mantenemos más unidos”, señaló Crow, quien compite en la modalidad de bodyboard en el equipo ecuatoriano que intervendrá en la vigésima edición del mundial surfista.

Interesantes historias se pueden descubrir en el surf, como la quiteña Orissa Alvear, quien destaca en la categoría tablas damas. Nació en Quito hace 18 años, pero desde los 4 meses de edad se radicó en la isla Santa Cruz, de Galápagos.

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Desde pequeña aprendió a hacer bodyboard, pero dos años atrás tomó el surf de manera profesional. Tanto Orissa como Iliana coinciden en que para la gente es extraño ver a una mujer con su tabla bajo el brazo y subirse a una gran ola, pero en los últimos cuatro años el concepto machista de la sociedad que el surf es para los hombres está en pleno cambio.

La  exigencia en los entrenamientos son los mismos en comparación con los hombres. No hay excepción, y ellas tampoco lo permiten. Iliana compartió la alegría de ser seleccionada para representar al país en el Mundial con sus hijos: Xavier, de 16 años, María Beatriz (13), Santiago (9), Iliana (6) y María Gabriel (2). “Es una de las cosas más lindas que me ha sucedido. Mi familia cuando se enteró no salía de la felicidad”, agregó.

La primera tabla que tuvo Andrea Vinueza fue a los 12 años. Trabajó desde los 15 años para comprar los implementos necesarios para la práctica del surf. Admitió que hace tres años recibió desplantes por parte de tablistas peruanos y argentinos en la playa de Montañita. “Me decían que me vaya a trabajar, que salga del mar que eso es para hombres”, comentó la surfista que nació hace 25 años en Manta.

La ganadora de la medalla de bronce en los juegos Bolivarianos del 2001, en Salinas, indicó que en el país desde hace cuatro años la presencia de la mujer en el surf es importante y que en pocos años se puede llegar al nivel de las tablistas brasileñas, estadounidenses y peruanas, pero con mucho trabajo en las próximas generaciones.

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TABLAS
En el sector
de Tres Cruces, en el balneario de Salinas, el equipo ecuatoriano entrenó la mañana de ayer, con la supervisión del director técnico Roberto Lynch, y el venezolano Claudio González, técnico de la delegación.

Los jueces confirmados para el Mundial de Surf son los siguientes: Cyrill Nel, de Sudáfrica; Glen Elliott, de Australia; y Francisco Garritano, de Brasil. Como jueces secundarios estarán: Jordao Bailo Jr., de Brasil; Chad Loan, de Australia; Nino Lauro, de Perú; Elvis Carter, de Barbados; y Ryan Roberts, de Sudáfrica.

El sistema de calificación para el mundial surfista se basará en el tamaño de las olas (en Salinas estas llegan a dos metros), la agresividad de los surfistas en las maniobras, el recorrido y estilo original. Estas son normas básicas que se aplican en los diferentes torneos internacionales.

Lissette Prado, integrante del equipo ecuatoriano, en la categoría Tablas Damas, es la más joven del grupo, con 16 años. Nació en Guayaquil el 25 de mayo de 1987. Cursa el sexto año del colegio Jefferson.