Grillos con patacones y guacamole, capullos de gusanos de seda sobre huevos de codorniz, escarabajo gigante de agua o escorpiones flambeados constituyen, a juicio de la cocinera española Montserrat Guillén, el fenómeno culinario emergente en Occidente.

Esta cocinera y su colaborador, el colombiano Juan Pablo Valencia, convirtieron los insectos en los protagonistas de sus platos en el encuentro de cocina contemporánea BCNVanguardia de la feria Alimentaria, que concluyó el viernes en la ciudad española de Barcelona.

Para Guillén, los insectos son “divertidos, versátiles y aportan diferentes texturas y sabores a los platos”, y añadió que la cocina de insectos se enfrenta en Occidente a un problema de “prejuicios”, que pueden solucionarse.

Publicidad

La cocinera, que vive en Miami, dijo que “si comemos insectos de mar como la langosta, la gamba y el cangrejo, no sé por qué no podemos hacer lo mismo con los de tierra”, y explicó que ocho de cada diez animales son insectos “por lo que no nos debe extrañar que acaben estando en los menús de cualquier restaurante”.

Guillén dice que en países latinoamericanos como México o Colombia comen gusanos; en Tailandia, grillos y en Vietnam o Camboya los escarabajos gigantes de agua son un plato estrella.