Solo 37 familias en el cantón usan el sistema de aguas servidas, que se inauguró en junio del 2003.

Desde que terminó de construirse el sistema de alcantarillado de esta localidad, en junio del 2003, tan solo 37 familias han realizado los trámites para que sus viviendas puedan disponer de este servicio.

“Nos preocupa que tan pocos ciudadanos tengan interés en eliminar de una manera técnica sus desechos”, manifestó Jessenia Vélez, directora del Departamento de Comunicación del Cabildo.

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Para promover el uso de este sistema entre los habitantes del cantón, se ha contratado publicidad radial y de perifoneo (megáfonos). No obstante, según Vélez, estas acciones no han dado los resultados esperados.

Según el último censo de población y vivienda realizado en el 2001, el área urbana de Jaramijó tiene 2.170 viviendas particulares ocupadas, de 2.473 disponibles.

Según Jessenia Jaramillo, directora del área de planeamiento urbano de la Municipalidad, una de las causas del desinterés de la ciudadanía es la falta de una cultura urbanística de desarrollo en esta población, elevada a la categoría de cantón en 1999, luego de ser por décadas parroquia de Montecristi.

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Falta de recursos
“Nosotros no hemos hecho la solicitud porque hay que pagar una tasa y estar al día en los predios urbanos. No tenemos dinero para esos gastos”, afirmó una moradora del sector Seis de Diciembre que prefirió no identificarse.

Los requisitos para acceder al servicio de alcantarillado son cancelar una tasa de 10 dólares en el Municipio y estar al día en el pago de los predios urbanos.

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Henry Zambrano, secretario del Municipio, señaló que según estudios del Ministerio de Bienestar Social, la población de Jaramijó es una de las que más bajos ingresos económicos tiene en el país. “La pobreza es una razón fundamental para que las personas no puedan acceder a este tipo de servicio”, agregó.

Por otra parte, Jaramillo sostuvo que según el volumen de agua que llega a las bombas de impulsión y lagunas, hay personas que utilizan el servicio de forma clandestina. “Si la gente sigue conectándose ilegalmente, no solo la ciudad se perjudica económicamente, sino también toda la estructura del sistema”, aseveró.

LA OBRA
Construcción
La obra, que comprende nueve fases, la realizó el Ministerio de Desarrollo Urbano y Vivienda (Miduvi), en convenio con la Municipalidad.

Costos
En el 2003, la primera inversión del Miduvi fue de 720.000 dólares, con lo cual se cubrió el 70%. La última fase, que incluye también a las viviendas que están ubicadas en la periferia, tiene un costo de $ 150.000. 

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Difusión
El Municipio ha realizado varias campañas radiales y de perifoneo para pedir a las familias que se conecten técnicamente al alcantarillado.