Al no dudarse de los extraordinarios ingresos monetarios por el elevado precio del petróleo, se han fortalecido las presiones para que se pague a quienes todavía esperan ese cumplimiento.

Hay amenazas de violencia si no llega dinero al sector de la salud.

Las universidades recuerdan que son cientos de millones de dólares que les debe el Gobierno. Y la inmediatez de su cancelación la expresa la Universidad Central.

Publicidad

Hay que percibir el sustento que da a su rectorado una línea política de fuerte carácter.

Los educadores explican que sus protestas no se deben únicamente al retraso de sus mensualidades, sino a la gran deuda de un sueldo anual que hace meses debió estar cancelado. Como lo ha hecho la empresa privada.

Total es que con diligencia, las respuestas del Gobierno al pagar lo que adeuda, será la mejor vía para reducir la irritación de los reclamos y los paros.

Publicidad