El gerente de Créditos y Cobranzas, Washington Alvarado, justifica las acciones de la entidad afirmando que cada seis meses (enero y julio) inician la recategorización del servicio, es decir, “que el personal revisa las planillas de los usuarios de la categoría A (popular) y B (residencial)”.

Para acceder a la categoría A, según Alvarado, “el cliente debe pagar mensualmente 1,15 dólares y 6,90 dólares por los seis meses”. Si estos valores son excedidos, cambia la categoría de A a la B. Asimismo, “si paga menos de 30 dólares semestrales, pasa de B a A”, expresó el funcionario.

Este mecanismo, según la entidad, es una forma en que  subsidian a los que no tienen capacidad para acceder al servicio.

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