Se niega a aceptarlo por que a él, como a cualquier otro fan del cuarteto irlandés, le gusta pensar que la sigla en realidad es un juego fonético de doble sentido.

Prefiere pensar que la verdadera pronunciación del nombre es you too (tú también) y que por ende,  él hace parte desde siempre de la historia de esta banda. 

Y claro, evidentemente hay mucha subjetividad en las apreciaciones de un fan-periodista-fan que probablemente ataría cuantas conjeturas le fueran posibles con tal de sentirse parte de algo que admira; sin embargo, esto no puede ir contra los hechos.

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Ya sea que a usted le fascine U2 o lo deteste, es imposible negar que la entrada de esta banda a la historia del rock and roll no ha sido gratuita.

Más allá de inigualables canciones como With or without you (1986), Bad  (1984) o One  (1991), desconocer que de la mano de un genio como Bono, pocas veces en la historia pudo un grupo demostrar la fuerza revolucionaria del rock and roll sobre la política y/o el racismo, es simplemente tonto.

¿Cómo se ignora una versión en concierto de Sunday Bloody Sunday (1983 y 1988) protestando en contra de masacres como la del Irish Revolution Army (IRA) en Eniskillen?

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¿Cómo dejar pasar desapercibidos un Pride, In the name of love (1984) compuesta para Martin Luther King Jr., o un Silver and gold (1988) interpretada sobre los escenarios estadounidenses como clara protesta contra el apartheid sudafricano?

Sería tan absurdo como ignorar el compromiso político detrás de que, además de incluir una canción compuesta por Salman Rushdie en la banda sonora de The million Dollar Hotel (2000), Bono se haya dado el lujo de llamar al autor de los versos satánicos y pasarlo al aire (pantalla gigante de por medio) durante uno de sus conciertos de Zoo Tv; conciertos que por cierto se llevaban a cabo en el mismo momento en el que una recompensa pendía sobre la vida del autor de los Versos Satánicos.

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No se puede ignorar a U2 o su paso por el rock, y tampoco se puede ignorar la manera en que además de combinar los extraños efectos de guitarra que caracterizan a The Edge con una sección rítmica (Adam Clayton en el bajo y Larry Mullen Jr. en la batería) completamente rockera.

La banda ha optado por reinventarse  cada vez que la fórmula del éxito parecía descifrada. Con discos tan diferentes y distantes entre sí como Boy (1980) o Pop (1997); Joshua Tree (1986) y Auchtung baby! (1991), U2 ha logrado niveles de experimentación que hacen pensar en Los Beatles.

Tal vez por eso, este periodista que vibró con el video de la bandera blanca y la batería de Sunday bloody Sunday, que se conmovió con With or without you, In a little while o One, y que se sorprendió con las influencias dance de Discotheque y Mofo, se niega a pensar que tanta magia pueda ser producto de un prototipo de avión.

ACORDES
En 1976 el baterista Larry Mullen Jr., nacido el 31 de octubre de 1961 en Dublín, Irlanda, puso un aviso en el tablón de anuncios de su escuela secundaria en Dublín, pidiendo músicos para formar una banda.

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Paul Hewson, vocalista y guitarrista nacido el 10 de mayo de 1960 en Dublín, Irlanda, conocido como Bono. David Evans, nacido el 8 de agosto de 1961 en Londres, Inglaterra; guitarrista y tecladista, apodado The Edge. Adam Clayton, bajista nacido el 13 de marzo de 1960 en Chinner, Oxfordshire, Inglaterra;  y Dick Evans guitarrista hermano de The Edge; respondieron.

El grupo se formó como una banda de covers de Los Beatles y los Stones llamada Feedback, antes de cambiar su nombre a Hype en 1977.  Inmediatamente después, Dick Evans dejó la banda para formar otra llamada Virgin Prunes. Después cambiaron su nombre a U2.

La banda planea publicar el año próximo un libro sobre su historia bajo el título: In the name of love: U2 by U2. Jim Henke sería el autor propuesto y su salida debe coincidir con la presentación del nuevo álbum y el 25º aniversario del grupo.