Dramáticos testimonios sobre torturas y otros sobre el contexto político de la última dictadura (1976-1983) componen "El Nüremberg argentino", una película sobre el juicio a las Juntas Militares que se estrena mañana, jueves.
 
El largometraje documental, dirigido por Miguel Rodríguez Arias, es una coproducción con España basada en los archivos del juicio realizado en 1985.
 
"El Nürember argentino" contiene con material fílmico de la época inédito y entrevistas actuales a los cuatro jueces que integraban el tribunal, así como a personas que fueron secuestradas por los militares y a pensadores e intelectuales.
 
El primer testimonio que se ve en escena, uno de los más desgarradores, es el de Adriana Calvo de Laborde, que cuenta cómo parió a su bebé a bordo del automóvil de sus captores, que no repararon en asistirla.
 
El importante valor histórico de este documental reside en que el gobierno que presidía Raúl Alfonsín (1983-1989) consideró, en el momento en que se llevó a cabo el juicio, que no estaban dadas las condiciones para transmitirlo por televisión y sólo autorizó a televisar algunos minutos sin sonido.
 
El lunes último, cuando se realizó el pre estreno del filme, fue la primera vez que los jueces y el fiscal del juicio vieron los testimonios televisados.
 
Otro de los relatos más conmovedores es el de Mario Villani, que, después de haberse negado, aceptó finalmente arreglar la picana con la que los militares torturaban a los que como él, que tiene conocimientos de electricidad, estaban secuestrados en un centro clandestino.
 
La arregló, aunque le redujo el voltaje, sólo para que así dejaran de utilizar para las torturas el Variak, un transformador que no posee limitaciones en sus descargas de energía eléctrica.
 
No toleraba ver "cómo pasaban delante mío las personas luego de ser torturadas" con ese transformador, dijo Villani, quien precisa que la picana, al menos, "posee limitaciones en su descarga".
 
El documental incluye entrevistas a los jueces del tribunal: León Arslanian, Ricardo Gil Lavedra, Jorge Torlasco y Andrés DAlessio.
 
También hablan el fiscal Julio César Strassera, el Premio Nobel de la Paz Adolfo Pérez Esquivel, la presidenta de Abuelas de Plaza de Mayo, Estela de Carlotto, el periodista, escritor y hoy diputado Miguel Bonasso y el pensador Tomás Abraham.
 
La historia también se cruza con los hechos ocurridos entre 1976 y 1983 como el Mundial de Fútbol 1978 que se realizó en Argentina y la mirada desconfiada del hoy ex jugador Diego Maradona cuando saludaban en la Casa Rosada a los militares gobernantes, después de haber ganado el Mundial juvenil de 1979.
 
Además, rememora un discurso del presidente de facto Rafael Videla en el que dijo: "un desaparecido no está. Es una incógnita. Ni muerto ni vivo".
 
Según aseguró en una entrevista al diario "El Cronista", Rodríguez Arias busca "enriquecer la percepción de la realidad" con este largometraje.
 
"Posiblemente la historia del país hubiese sido distinta si se hubiera transmitido por televisión el juicio completo", indicó.
 
Ganador del Premio Iberoamericano de Periodismo Rey de España en 1997 por un reportaje sobre el fotógrafo argentino José Luis Cabezas, asesinado ese mismo año, el cineasta tuvo acceso a las 530 horas grabadas en vídeo del juicio oral y público a los integrantes de la dictadura militar que se realizó en 1985.
 
El juicio a las Juntas Militares comenzó el lunes 22 de abril de 1985 y culminó el 9 de diciembre del mismo año, cuando después de casi ocho meses se leyeron las sentencias condenatorias.
 
El banquillo de los acusados fue ocupado por nueve militares, de los cuales, Jorge Videla y Emilio Massera fueron condenados a reclusión perpetua; Roberto Viola, a 17 años de prisión efectiva; Armando Lambruschini, a 8 años, y Orlando Agosti, a 4 años y 6 meses. El resto fue absuelto.
 
Los condenados fueron luego beneficiados con un indulto dictado en 1989 por el entonces presidente Carlos Menem, aunque algunos de ellos regresaron a prisión años después al reactivarse distintas causas judiciales o abrirse otras como la que está abierta por el robo sistemático de bebés hijos de desaparecidos.