Crisis en los PAI por falta de teléfonos

Desde hace dos años, la Corpai exige a moradores que instalen las alarmas barriales y domiciliarias.

Aunque tener un teléfono para recibir llamadas de emergencia en cada Puesto de Auxilio Inmediato (PAI) es un requisito que exige la Policía, la ciudadanía no puede comunicarse con la mayoría de ellos.

En la ciudad funcionan 26 PAI,  11 de los cuales están a cargo de la Policía y 15 se mantienen de las donaciones de empresas privadas y son regulados por la Corpai (Corporación de los PAI) desde hace dos años. De los once que tiene la Policía, cinco están sin teléfono por falta de presupuesto, explicó el jefe de PAI y Retenes, subteniente Rolando Molina.

A los quince PAI de administración privada se les quitó el teléfono por decisión de la Corpai, pero a tres se les reinstaló por iniciativa de los moradores. A cambio, el director de esta entidad, Juan Verdesoto, impulsó la instalación de alarmas barriales y domiciliarias. “Había cuentas sin pagar y suspendimos el servicio”, acotó.

En catorce de los quince puestos que administra la Corpai, las alarmas son instaladas por Indusur, del grupo Induauto. Solo en el PAI del Barrio del Centenario, los equipos los puso Manrique Security. Adquirir una alarma cuesta $ 185 y mantenerla, $ 35 al mes ($ 39,20 con IVA).

Verdesoto dijo que el contacto de los moradores debe ser únicamente por medio de alarmas. “Eso es privado, si la persona no adquiere la alarma no tendrá acceso. Puede llamar al 101 o a Más Seguridad, que es gratis. Pero si quiere mayor protección, eso tiene un costo”, agregó.

Carlos Luis Barco, gerente de la Parrillada del Ñato, quien administra los PAI de Urdesa y Miraflores, concuerda con la medida. “Si ponemos teléfono todo el mundo anotará el número y como es obligación de la Policía defender a todos, nadie adquirirá la alarma”, cuestionó.

Verdesoto espera que Indusur cumpla con el 50% del pago mensual de cada cliente ($ 17,50) para mantenimiento.  Sin embargo, Barco y otros administradores de PAI no sabían de este compromiso. Del pago mensual de cada cliente, Indusur da $ 5 para el mantenimiento. Para los PAI de Urdesa y Miraflores entrega $ 800, que corresponde al pago de unos 160 clientes.

En el parque Centenario y plaza Rocafuerte cada puesto recibe $ 283 de 38 suscriptores, según la Corporación Boulevard.

Andreas Wiener, gerente de Indusur, dijo que su empresa aporta según la necesidad del PAI. Los administrados por la Corpai tienen un padrino: “Una empresa que costea sus gastos, y el ingreso que proviene del pago de las alarmas es aparte”, según Verdesoto.  

En el caso de los PAI de Urdesa y Miraflores, Barco indicó que el sistema de alarmas ha sido positivo. “A medida que haya más suscriptores, el PAI se autosustentará”.

No sucede así en los barrios marginales. Los moradores no tienen para alarmas domiciliarias y se instalan botones conectados por cable al PAI, en puntos estratégicos: la parada del bus, la tienda del barrio. Por estas alarmas no se paga pero a los padrinos (de cada PAI) les cuesta $ 1.200 instalarlas.