Siete personas murieron y otras 38 resultaron heridas en enfrentamientos entre opositores reformistas y partidarios conservadores del régimen islámico iraní, tras las informaciones sobre una victoria de esta última en las elecciones parlamentarias del viernes.

La República Islámica iraní registró la mayor abstención de su historia. De los 194 elegidos, 129 son conservadores, 39 reformadores y 28 independientes, que pueden también ser conservadores.

Los dirigentes conservadores presentaron este voto como una “bala al  corazón” del presidente de Estados Unidos, George W. Bush, que había afirmado que una fuerte abstención pondría en entredicho la legitimidad de la República Islámica.