Hay muchas ventajas para el productor con el uso del “banempac”, sistema de cosecha que hace más de 30 años dio la tecnología necesaria para lograr ese objetivo, luego de que el banano ecuatoriano acusaba en los mercados de consumo un estropeo de la fruta, que aunque no dañaba su pulpa, desmerecía su presentación reduciendo los porcentajes de calidad.

Se determinó desmanar los racimos en la mata y transportarlos sin ningún estropeo a la empacadora, para lo cual fue diseñada y construida dicha cuna especial o sistema de cosecha “banempac”, mediante el cual se logran tres fundamentales ventajas: mejorar sustancialmente la calidad de la fruta exportable; incrementar la producción exportable porque se recupera un considerable porcentaje de frutas que actualmente se está rechazando por estropeo, y con el incremento de producción se bajan los costos de procesamiento.

Pero, la idea de llenar buques con fruta procesada con el sistema “banempac”, para que se evalúe la calidad de la fruta que se pondría en los mercados de consumo, no se cumplió porque las transnacionales prohibieron el sistema indicado que sus inspectores no podrían calificar los racimos que llegaban desmanados a la empacadora; lo cual fue un ridículo pretexto con el que lograron que Ecuador no mejore la calidad de su fruta de exportación.

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Pero ahora, en que tenemos que ser altamente competitivos para mantenernos en los mercados bananeros, ha llegado el momento de llenar un barco con fruta procesada con el sistema “banempac”, y determinar la excelente calidad de fruta que se pondría en los mercados de consumo.

Para eso hay que escoger gremio de productores dispuesto a seguir las instrucciones y financiar el costo de las cunas y la asistencia técnica, lo cual sería inferior a lo que cuestan las atomizaciones de 40.000 hectáreas contra la sigatoka negra.

Ing. Agr. José M. Iturralde A.
Guayaquil
 

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