El comandante de la Tercera División del Ejército Tarqui, Hernán Bedón, dijo ayer, en rueda de prensa, que se investiga de dónde provino el disparo que mató a la campesina María Lalvay (63 años), durante las manifestaciones del lunes pasado en la comunidad de Shiña, del cantón Nabón.

Con la Constitución en la mano y refiriéndose al artículo 35, en el que se garantiza la libre circulación de los ecuatorianos, Bedón justificó la participación de los militares para despejar las vías.

Según Bedón los manifestantes en Shiña los atacaron cuando retiraban los obstáculos en la vía Panamericana Sur, en el kilómetro 49, por lo que dos sargentos fueron retenidos. En ese momento, dijo, se lanzaron bombas lacrimógenas y posiblemente se generaron disparos.

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El oficial enfatizó que nunca existió orden de disparar. Galo Cerda, comandante de Brigada, dijo: “Pudo ser una bala perdida, por lo que realizamos investigaciones para determinar el calibre de las balas”.

Respecto a la agresión a periodistas de diario El Comercio, a quienes se les obligó a borrar tomas fotográficas, Bedón pidió cordura a los medios de comunicación y que “ayuden a alentar a este país, no ayudar a incendiarlo”.

Entretanto, el gobernador del Azuay, Efendy Maldonado, convocó a representantes de derechos humanos, periodistas y otros sectores a formar una comisión para esclarecer los incidentes.

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Freddy Castro, intendente de Policía, dijo que los 19 detenidos fueron liberados.

Comunicado de Iglesia
La Arquidiócesis de Cuenca emitió ayer un comunicado mediante el cual se solidariza con los indígenas agredidos con disparos, “cuando expresaban su derecho a una vida digna, con la consecuente muerte de María Lalvay.

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Manifestó su inconformidad “frente a la actitud dictatorial disfrazada de democracia”. Y rechazó la política económica “neoliberal” del régimen.

INCIDENTES
SEPELIO
Hoy, a las 12h00, en la comunidad de San Miguel de Rañas se efectuará el sepelio de María Lalvay, cuya misa la oficiará monseñor Luis Alberto Luna Tobar.

DENUNCIA
Dirigentes campesinos señalaron que el Ejército ha incumplido su promesa de atender en el Hospital Militar de Cuenca a los heridos que resultaron de los incidentes ocurridos el pasado lunes en la comunidad de Shiña, del cantón Nabón.