El Nobel de Literatura presidió el encuentro por la paz

El Encuentro Pablo Neruda por una Cultura de Paz, convocado por la Fundación Guayasamín, comenzó ayer con media hora de retraso. Estaba previsto para las 11h00 y se inició a las 11h30. ¿El motivo? la demora del Premio Nobel de Literatura, José Saramago, en llegar a la Capilla del Hombre, lugar de la cita.

Minutos antes, el escritor fue declarado Huésped Ilustre de Quito por el alcalde de la ciudad, Paco Moncayo, y por el tránsito y porque Saramago dedicó algunos momentos al público, retrasó su arribo al acto.

La gente que se encontraba en la Capilla (estaba semivacía, con la mitad de su capacidad), se puso de pie y aplaudió cuando el Nobel ingresó al lugar. Inmediatamente, Saramago tomó asiento en la mesa directiva, junto con el ex presidente de la República Rodrigo Borja; Gustavo López Ospina, representante de la Unesco para el Ecuador, y Raúl Pérez Torres, presidente de la Casa de la Cultura Ecuatoriana, expositores del encuentro.

Alfredo Vera Arrata, de la Fundación Guayasamín, y Pedro Saad Herrería, también formaron parte de la mesa, en calidad de moderadores. Lisandro Otero, escritor cubano, se incorporó una vez que comenzó el acto. Una manifestación de estudiantes en las calles quiteñas impidió que llegase puntual a la Capilla.

Federico Mayor Zaragoza fue el ausente. Vera dijo que un inconveniente de última hora impidió que el ex funcionario de la Unesco, viniera a Quito para participar en la cita.

Saramago, que tenía prevista su intervención para horas de la tarde, fue el primero en tomar la palabra, por pedido de Vera, quien solicitó a todos los expositores, antes de leer sus ponencias, comenten lo que para ellos significa la paz. El Nobel refirió que hay palabras que parecen decir mucho, pero que no dicen tanto, y una de ellas es la paz. Lamentó que los seres humanos no sean educados para la paz, sino para la guerra.

López, Pérez y Otero leyeron luego sus ponencias, en un acto que se prolongó hasta las 13h30, cuando se clausuró la primera jornada. Pilar del Río, la esposa de Saramago, que se encontraba entre el público, se unió al Nobel y juntos salieron de la Capilla del Hombre. Poco antes, Vera anunció que el escritor había suspendido su viaje a Galápagos, que había planificado para hoy.

Se tenía previsto comenzar la segunda jornada del encuentro a las 16h00 y clausurarse a las 18h00, con la conferencia de Saramago.

Las ponencias serán recogidas en un libro memoria.