La Agencia Internacional de Energía Atómica (AIEA) descubrió en Irán piezas de un modelo sofisticado de centrifugadora que Teherán debería haber declarado, indicaron este jueves fuentes diplomáticas en Viena.
Los inspectores de la agencia de las Naciones Unidas encargada de la seguridad nuclear decubrieron "las piezas de una centrifugadora G-2", un equipo moderno utilizado para enriquecer uranio, precisó un diplomático en la capital austriaca.
Estas declaraciones confirman una información aparecida el mismo día en el cotidiano estadounidense USA Today según la cual los inspectores de la AIEA habían descubierto material sofisticado que sirve para enriquecer el uranio en una base aérea militar cerca de Teherán.
Según el diario, el fin de semana este material debía ser enviado por los inspectores a la sede de la AIEA en Viena, y podría contradecir las garantías dadas por Irán de que no está implicado en ningún programa de armamento nuclear.
El equipo descubierto en la base aérea de Doshen-Tappen es un sistema de centrifugadora que ya fue probado, agrega el diario. Se trata de un sistema utilizado para refinar el uranio destinado a los reactores nucleares o a las bombas atómicas, pero nada permite afirmar si hubo allí uranio que fue introducido o enriquecido, según fuentes citadas por USA Today.
Las centrifugadoreas son utilizadas para separar en el mineral de uranio las moléculas de uranio 235. Se necesitan 21 kg de uranio 235 enrequecido a 80 o 90% para fabricar una bomba atómica, según los especialistas.
Si la AIEA descubriese planes de armas atómicas, esto constituiría la "prueba irrefutable" de que el programa nuclear iraní tiene también vocación militar, declaró otro diplomático que pidió mantener el anonimato.
Si esta "prueba" quedara establecida, la AIEA podría enviar el expediente nuclear iraní ante el Consejo de Seguridad de la ONU, que debería entonces decidir si adopta sanciones contra el régimen islámico.
El martes, el ministro iraní de Relaciones Exteriores, Kamal Jarazi, había reconocido que su país efectuaba investigaciones sobre una segunda generación de destinadas a enriquecer el uranio, pero sostuvo que actualmente no posee uranio enriquecido.
La semana pasada, diplomáticos de la AIEA en Viena habían afirmado que los inspectores de la agencia habían encontrado los planos de un modelo avanzado de centrifugadora que Teherán no había declarado, a pesar de comprometerse con la AIEA a una "transparencia y una cooperación totales".
A fines de 2003, Irán se había comprometido a suspender el enriquecimiento del uranio, satisfaciendo una exigencia esencial de la comunidad internacional, que sospecha que Teherán querría dotarse del arma nuclear.
En octubre, el Consejo de Gobernadores de la AIEA lanzó un ultimátum a Irán exigiéndole que revelase todos los detalles de su programa nuclear. El Consejo debe reunirse el 8 de marzo para examinar el caso iraní.
En noviembre, la AIEA afirmó que Irán le había escondido durante 18 años los aspectos más sensibles de su programa nuclear, incluyendo al enriquecimiento del uranio.