Un total de 4.450 curas católicos estuvieron involucrados en casos de abuso sexual en EE.UU. entre los años 1950 y 2002, según un informe de la Conferencia Episcopal Católica difundido hoy por la cadena de televisión CNN.
 
El informe, que será publicado oficialmente el próximo día 27, recoge información referente a 110.000 sacerdotes en un periodo de 52 años y fue elaborado por una institución universitaria vinculada a la Iglesia Católica, que examinó los registros parroquiales.
 
Más de la mitad de los religiosos imputados fueron acusados de abusos por menores en al menos una ocasión, el 25 por ciento -1.112 curas- lo fueron en dos o tres ocasiones, y el 13 por ciento -578- lo fueron hasta en nueve ocasiones.
 
El informe señala que en total hay registradas 11.000 acusaciones de abusos sexuales a menores, de las que 6.700 fueron investigadas.
 
Otras 1.000 fueron desestimadas, y las 3.300 restantes no fueron investigadas porque los sacerdotes involucrados habían muerto en el momento en el que se presentaron las acusaciones.
 
Según el documento, el 78 por ciento de las víctimas sufrió los abusos entre los 11 y los 17 años; el 16 por ciento entre los 8 y los 10 años, y cerca del 6 por ciento cuando tenían menos de 7 años.
 
Los responsables del informe consideran que el problema se acentuó por "la incapacidad para darse cuenta de su gravedad, el intento a toda costa por tratar de evitar el escándalo, la falta de centros en los que tratar a los curas pederastas, la voluntad errónea de perdonar y la falta de asunción de responsabilidades".
 
El presidente de la Conferencia Episcopal, el obispo Wilton Gregory, informó en un comunicado de que el 27 de febrero se publicarán dos informes, uno sobre los casos ocurridos y otro para determinar si se puede ahondar en el problema, y dijo que no hará comentarios hasta que no se difundan públicamente.
 
"No he visto los informes, así que no puedo hacer comentarios sobre su contenido, pero quiero reafirmar que los obispos requirieron estos estudios, de manera que podamos entender qué causó estos terribles sucesos en la vida de nuestra comunidad", dijo.
 
El director de la Red de Supervivientes de los Abusos de Sacerdotes (SNTAP por sus siglas en inglés), David Clohessy, dijo que los números que ofrece el informe de los obispos son inferiores a los casos ocurridos en la realidad.
 
"Los obispos han intentado esconder esto durante años, así que no hay razón para creer de repente que quieren cambiar su manera de actuar", dijo.
 
"Lo único prudente que se puede hacer es asumir que esto no es toda la verdad. Es un sondeo, no un informe o una investigación", manifestó Clohessy.