La Policía presentó ayer al presunto cómplice del asesino de Patricio Campana, jefe de la Unidad de Movilización de Productos de Petrocomercial, hecho que ocurrió el 30 de enero pasado en los bajos del edificio donde laboraba el funcionario, en la avenida 6 de Diciembre y Alpallana.

El supuesto responsable es Diego Jefferson Beltrán Rojas, ecuatoriano, a quien la Policía detuvo la noche del pasado jueves, en el sector de Solanda, al sur de Quito.

Acosado por los reporteros, Beltrán Rojas declaró ayer que el crimen se dio cuando intentaban robarle a Campaña su maletín; sostuvo que él no disparó en contra del técnico de Petrocomercial. “Yo manejaba el auto”, sostuvo.

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Aunque el proceso legal no ha concluido, el comandante general de Policía, Jorge Poveda, aseguró que está demostrado que el asesinato fue ejecutado por la delincuencia común. No pudo explicar, sin embargo, por qué los ladrones no se llevaron el maletín de Campana.

El ministro de Gobierno, Raúl Baca, presente durante el acto, dijo que lamentaba no tener información sobre los otros dos casos. Se refería a los supuestos atentados perpetrados en contra del presidente de la Conaie, Leonidas Iza, en Quito, y del propietario de Telesistema, Carlos Muñoz Insua, en Guayaquil.

Baca aclaró que la detención de dos personas supuestamente implicadas en el asesinato de Campana (la otra detenida es María Belén Moya Ortiz) no supone que la investigación del robo de combustibles en Petroecuador haya terminado.

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“Esto no me deja tranquilo con respecto al tema (...) ya que estos robos también desorientan a la opinión pública”, puntualizó el ministro.

Baca se comprometió a seguir investigando estos casos, ya que un informe sobre estos hechos preparaba Campana días antes de que fuera victimado.

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INVESTIGACIÓN
INTERROGANTES
El comandante de la Policía, Jorge Poveda, admitió que aún quedan interrogantes en el caso de Patricio Campana. Cuando se le preguntó por qué los ladrones no se llevaron el maletín, dijo que “hay que preguntarles a ellos”.

PRÓFUGOS
El coronel Juan Sosa, jefe de la Policía Judicial de Pichincha, afirmó que son cuatro los delincuentes que actuaron en este caso. Están prófugos: Ángel Vinicio Narváez y Daniel Marino Salinas Villaguano.