Médicos cubanos se suman a lucha contra epidemia de rotavirus en Guatemala

Más de 500 médicos cubanos que trabajan en  Guatemala se sumaron a la lucha para contrarrestar una epidemia de rotavirus  que afecta Al país y ha causado la muerte de al menos 32 niños, informó este  jueves el jefe de la misión caribeña, Daniel Pupo.

"Nuestra respuesta y disposición son inmediatas, incluso los médicos han  renunciado a sus descansos de fin de semana, y están laborando en localidades  donde habitualmente no tienen presencia", dijo Pupo a radioemisoras locales.

Pupo explicó que desde que se conoció la noticia sobre el brote del  rotavirus, hace casi tres semanas, se activó un plan de emergencia con un puesto  de mando central en la sede del contingente de médicos, en la capital, así  como en otros en puntos críticos de la epidemia en el interior del país.

El galeno comentó que aún no han recibido una invitación oficial para  combatir la epidemia, pero aseguró que los médicos cubanos trabajan desde hace  días en función de detener en las comunidades del interior del país la  enfermedad que afecta principalmente a niños menores de cinco años.

El ministro de Salud de Guatemala, Marco Tulio Sosa, comentó que pedirá  formalmente al contingente cubano incorporarse a las tareas para enfrentar el  mal, el cual afecta a 17 de los 22 departamentos del país.

De acuerdo con estadísticas del Departamento de Epidemiología del  Ministerio de Salud, en los últimos 40 días han sido atendidos 28.200 niños con  enfermedades diarreicas agudas, de los cuales 53% ha dado positivo con el  rotavirus.

Hasta el pasado lunes se contabilizaban 24 menores fallecidos, y tres días  después la cifra se había incrementado a 32.

El departamento de Guatemala (centro) es el más afectado con 15 decesos,  seguido de Escuintla con seis y Suchitepéquez con cinco (ambos en el sur), dos  en Sacatepéquez (oeste), así como uno en San Marcos (oeste), otro en Sololá  (oeste), uno en Retalhuleu (sur) y otro Alta Verapaz (norte).

La brigada cubana llegó a Guatemala en noviembre de 1998, tras el paso  devastador del huracán Mitch por Centroamérica, y desde entonces han prestado  sus servicios más de 1.700 profesionales cubanos, de los cuales 527 trabajan  actualmente en zonas apartadas de 17 departamentos del país.