“Una de las razones por la que el agua potable en el cantón Playas llega en mal estado al consumidor final es la situación de las tuberías, ya que estas son obsoletas”, afirmó ayer Jorge Guerrero, gerente general de Hidro Playas, empresa que desde la semana pasada está a cargo de la distribución y comercialización del servicio en el balneario.

Otro motivo, agregó el funcionario, es la vetustez de  los tanqueros que entregan el líquido a Playas y  zonas aledañas (Posorja, Data de Posorja, El Morro y puerto El Morro). 

“Estos se encuentran oxidados y en un informe enviado por el Municipio de Guayaquil se comunicaba que hay vehículos que por su vetustez no pueden distribuir el líquido”.

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No obstante, Hidro Playas junto con Hidros Pacific, compañía contratada para el tratamiento del líquido en la planta de San Antonio del balneario, deslindan responsabilidades.

Estas dos empresas aseguran que el agua hasta el tanque de reservorio llega apta para el consumo y que ellos todavía no forman parte en el asunto de cambios y mantenimientos en las redes de distribución.

Guerrero anunció que ya se colocaron las tapas en el tanque de reservorio del cantón, que provee de líquido a los 30.045 habitantes.

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Además, indicó que cada tapa tiene dos candados y las llaves las poseen el funcionario y el operador de la planta de tratamiento. “Pusimos la tapa para que nadie trate de meter sus baldes y contamine el agua”, manifestó.

Los trabajos en el reservorio se iniciaron debido a un informe de la Dirección de Salud del cabildo de Guayaquil, en el que se precisaba que el agua del tanque presentaba contaminación fecal. La limpieza del tanque es ejecutada, a partir del pasado 23 de enero, por Hidros Pacific S.A.

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Desde hoy también se empieza a trabajar en las filtraciones que se observan en el tanque.