El asesinato del colombiano Albeiro "Palomo" Usuriaga, cometido anoche en la puerta de su casa de Cali (suroeste), pudo haber sido cometido por un menor de edad en venganza porque el futbolista presenció un crimen.
 
El coronel Mario Gutiérrez, comandante de la Policía de Cali, dijo que "todos los indicios apuntan a un jovencito que, acompañado por otra persona", llegó al sitio en el que Usuriaga departía con amigos".
 
"Aparentemente Usuriaga fue testigo el pasado fin de semana de un crimen", indicó el oficial a la cadena de radio "RCN".
 
El delantero colombiano, de 37 años, recibió siete disparos, uno de ellos en la cabeza, mientras jugaba a las cartas con unos amigos en el barrio "12 de octubre" de Cali, capital del departamento del Valle del Cauca, 450 kilómetros al suroeste de Bogotá.
 
Aunque el jugador alcanzó a ser trasladado a una clínica de Cali, falleció por la gravedad de las heridas.
 
El delantero asesinado conformó la selección colombiana que participó en el Mundial de Italia90 bajo las órdenes del técnico Francisco "Pacho" Maturana.
 
Militó en los clubes América y Deportivo Cali, de esta ciudad; Atlético Nacional, de Medellín; Millonarios, de Bogota; el Málaga español, Independiente, de Argentina; Carabobo, de Venezuela; y Sporting Luqueño, de Paraguay.