Durante el Super Bowl del domingo, John Elway seguramente recordará las glorias y derrotas que tuvo en esos duelos por el título de la NFL. Por su parte, Barry Sanders lamentará probablemente el no haber jugado nunca el partido grande, pese a una brillante carrera.
 
Sin embargo, ambos estarán disfrutando el haber sido elegidos la víspera como miembros del Salón de la Fama del Fútbol Estadounidense Profesional.
 
Como se esperaba, dos de los más destacados y populares jugadores en la historia de la NFL llegaron el sábado al Salón de la Fama, en su primera postulación.
 
Elway, conocido como el rey de las volteretas en el marcador, y Sanders, todo un maestro en el arte de escaparse con el balón, ratificaron su condición de jugadores legendarios, lo mismo que Bob Brown y Carl Eller, también electos.
 
Hasta que alguien me demostraba lo contrario o hasta que llegaba al vestuario para quitarme el uniforme, yo no dejaba de buscar algún modo de ganar, recordó Elway, quien sumó 148 victorias, la mayor cantidad para un quarterback en la historia de la NFL.   Quiero agradecer a todos los colegas con quienes jugué.
 
Elway disputó cinco Super Bowls. Perdió los tres primeros, pero obtuvo dos títulos consecutivos en el ocaso de su carrera de 16 años.
 
Sanders fue el primer jugador en totalizar 1.000 yardas por tierra tras sus primeras 10 temporadas, y fue el líder de la liga en ese departamento en cuatro ocasiones. En 1997, fue designado el jugador más valioso, junto con Brett Favre, después de sumar 2.053 yardas.
 
Corrió para 100 yardas o más en 14 partidos consecutivos, pero los Lions de Detroit nunca llegaron a un Super Bowl.
 
Sanders se retiró a los 31 años, en la cúspide de su carrera.
 
Cuando pienso en el Salón de la Fama, me parece que es algo que corresponde a alguien más, dijo Sanders.   Pienso en Dick Butkus, Walter Payton, nombres de ese calibre. Sinceramente creo que en cierto modo estaré fuera de sitio.
 
Sin embargo,   creo que el público veía algo único en nosotros. Algo que no veían todos los días, añadió.
 
Brown, tackle de las Eagles, los Rams y los Raiders, fue uno de los bloqueadores más temidos de su tiempo. Seleccionado seis veces para el Pro Bowl, fue un jugador dominante hasta su retiro en 1973.
 
Eller, miembro de la famosa línea defensiva de los Vikings de Minnesota, jugó 16 temporadas y 225 partidos. Cinco veces presente en el Pro Bowl, atrapó en numerosas veces a los quarterbacks contrarios.