El brote de una nueva epidemia de dengue en Perú este mes, con más de 600 casos, puso de manifiesto las duras condiciones de vida en zonas marginales del país y reavivó los temores de que el mal se convierta en una pandemia.

El Ministerio de Salud peruano informó ayer de la aparición de 633  casos, tres de ellos de dengue hemorrágico en el norte de Perú y en una región de la Amazonia fronteriza con Brasil.