El ministro de Educación, Roberto Pasaillaigue, anunció ayer que solicitará al Congreso que archive el proyecto de Ley de Educación, cuyo informe fue presentado por la Comisión de Educación del Legislativo, el 23 de enero pasado, para segundo debate.

Pasaillaigue explicó que la ley, tal como será discutida en el Congreso, no contribuye a una mejora del sistema educativo y es un texto legal desarticulado, donde se confunden las normas legales con los reglamentos.

“Esa ley le da un poder extremo al sindicato de maestros en las decisiones administrativas del ministerio”, expresó Pasaillaigue y agregó que esa cartera perdería sus funciones como organismo rector de la educación.

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El funcionario informó que, en caso de que el Congreso aprobara la ley, solicitará al presidente de la República, Lucio Gutiérrez, que la vete.

Pasaillaigue cuenta con el respaldo del Foro de ex ministros de Educación, que, en una sesión efectuada ayer, se expresó a favor de elaborar un nuevo proyecto de ley.

Rosalía Arteaga dijo que la nueva ley no es coherente y no tiene el marco jurídico adecuado. En tanto, Raúl Vallejo explicó que el proyecto no recoge un propósito general para mejorar la educación en el país y que politizaría más el gobierno escolar.

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Roberto Hanze recordó que el proyecto lleva ya cinco años en discusión, desde 1999; sin embargo dijo estar de acuerdo con Pasaillaigue en que se archive la ley.

“Así como está, no puede ser aprobada”, expresó, al tiempo de añadir que ya se han presentado 20 proyectos de ley que no han tenido éxito.

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Rosángela Adoum sugirió que, en lugar de la ley, se trabaje en un proyecto de Código de la Educación, similar al Código de la Niñez.

Milton Luna, director del Contrato Social por la Educación, organismo que lideró el diálogo nacional para configurar la nueva ley, indicó que una comisión revisará el informe presentado al Congreso, para verificar si se recogieron los criterios emitidos en el diálogo nacional.