El Gobierno español, presidido por José María Aznar, acordó este lunes en sesión extraordinaria la disolución del parlamento y la convocatoria a elecciones generales para el 14 de marzo.
 
"Al terminar mi mandato no tengo intención de girar la cabeza y de mirar hacia atrás, me marcho con la conciencia tranquila", dijo Aznar en rueda de prensa tras informar al rey Juan Carlos sobre el decreto de disolución de las Cortes y comunicarle formalmente la fecha de los comicios.
 
"Pienso, serenamente, que he asumido en todo momento mi responsabilidad y que dejo cumplidos los compromisos que adquirí ante los ciudadanos", agregó Aznar.
 
"Tengo el orgullo de haber servido a España y la satisfacción de dejar a nuestro país en una situación mejor de como estaba cuando me hice cargo" del gobierno.
 
Aznar, además, hizo un llamamiento a favor de unas elecciones limpias y honestas el 14 de marzo, a las que definió como "trascendentales para el futuro de España".
 
El presidente del Gobierno y líder del conservador Partido Popular, quien no se presentará a los comicios, elogió las decisiones tomadas por su Ejecutivo en la legislatura que surgió de las urnas en marzo del 2000, y destacó entre ellas la lucha contra el terrorismo y el fortalecimiento de las instituciones.
 
Aznar aseguró que este período dejaba atrás una "intensa obra de gobierno" y de diálogo con los agentes sociales y los ciudadanos y definió los 25 años de democracia institucional como "los mejores 25 años de nuestra historia nacional".
 
Los comicios parlamentarios de marzo serán los novenos desde que España volvió a la democracia, tras la muerte del dictador Francisco Franco en 1975.
 
El PP, en el poder desde 1996, cuenta, según los últimos sondeos, con una ventaja de entre dos y 11 puntos porcentuales sobre el opositor Partido Socialista Obrero Español (PSOE).
 
Mariano Rajoy, el candidato del PP, ha establecido una línea de actuación similar a la de Aznar y su mayor desafío en las urnas será el socialista José Luis Rodríguez Zapatero, que también se presenta por primera vez como candidato a la presidencia del Gobierno.   
 
Por su parte, el líder del PSOE señaló también que "se cierra una legislatura decepcionante y se abre una nueva oportunidad de renovación y progreso para España", y reiteró la promesa hecha el fin de semana de que no intentaría formar un gobierno si su partido no es el más votado.
 
"Nos merecemos una España mejor, nos merecemos un gobierno transparente y moderno. Si somos el partido más votado por los españoles y sólo en ese caso formaremos gobierno", dijo Zapatero a periodistas.
 
En las elecciones del 12 de marzo de 2000, el PP logró la mayoría absoluta con 183 diputados de los 350 del Congreso, mientras que el PSOE obtuvo 125. Del resto de las principales fuerzas políticas, Convergencia i Unió (CiU) consiguió 15, Izquierda Unida (IU) 8 y el Partido Nacionalista Vasco (PNV) 7.
 
La campaña electoral comenzará el 27 de febrero y concluirá el 12 de marzo, día al que seguirá la jornada de reflexión, en vísperas de las elecciones, y en la que no se permitirá ninguna actividad electoral.